Se encienden las alarmas en el Palau

Unicaja

Unicaja / sport

Maite Antón

Maite Antón

Si algo puede salir mal, saldrá mal. ¡Qué se lo digan al Barça Lassa en el Carpena! El equipo de Georgios Bartzokas perdió en Málaga un partido que tenía prácticamente ganado en un final increíble, polémico para algunos, que hace encender las alarmas en el Palau. El Barça ha entrado en una dinámica peligrosa y el calendario que tiene por delante no invita a ser optimista. Pese a que los azulgranas recuperaron ese espíritu competitivo que se echó en falta en la pista del Galatasaray, lo cierto es que las derrotas se van acumulando en el haber del Barça y las vibraciones que transmite no son buenas. No destila confianza y se hace difícil imaginar a día de hoy al equipo luchando por los grandes títulos.

Hay dos urgencias. La primera es acelerar cuanto antes la llegada de fichajes. En Málaga se volvió a evidenciar que el equipo blaugrana necesita un base que coja el timón cuando Rice no juega, porque a Koponen se le vio un tanto precipitado cuando el estadounidense quedó eliminado. Y la incorporación de un pívot que aporte físico y agresividad es también obligada, porque Ante Tomic está acabando con la paciencia de Bartzokas... y con la de muchos otros culés. Rodrigo De la Fuente no tiene otra opción que mover ficha en los próximos días.

Y la otra es recuperar anímicamente a un equipo que está 'tocado'. El Barça ha sufrido muchos contratiempos en este inicio de temporada, pero el grupo debe hacerse fuerte porque quedan aún muchos obstáculos por delante. La dolorosa derrota ante el Madrid en la Euroliga hizo mucho daño, en especial a Bartzokas, y el KO en Turquía acabó de desmoralizar a los jugadores. Hay que rearmarse sí o sí, sacar el carácter y el orgullo para levantar esta situación que empieza a pintar mal. El Barça no se puede permitir una tercera temporada en blanco.