Yuri pone a prueba la mejoría en defensa del Girona

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La salida de Unzué, clave en ese aspecto. / EFE

Carles Rosell

Dos de los principales factores que provocaron la destitución de Juan Carlos Unzué fueron la tremenda irregularidad que mostró el Girona además de una evidente fragilidad defensiva. Tras perder en Oviedo (4-2), en el último partido antes del relevo en el banquillo, el equipo catalán era el séptimo más goleado del campeonato. Algo imperdonable en una categoría tan exigente como lo es la Segunda División y más para un vestuario que tiene el ascenso entre ceja y ceja. 

Sin Unzué, la mejora en este aspecto ha sido evidente. En los tres partidos después del cese, con Juan Carlos Moreno como puente y después con la llegada de Pep Lluís Martí, el conjunto rojiblanco solo ha recibido un gol. Un síntoma claro de mejora y que explican la reciente racha de siete puntos de nueve posibles y de tres jornadas sin conocer la derrota.

Se empató con el Alcorcón (0-0) en Montilivi, en un duelo en el que el rival apenas generó peligro. El Extremadura sí que superó a Juan Carlos, pero se ganó (1-3), mientras que hace una semana el Tenerife tampoco fue capaz de anotar (1-0). Con estos buenos números el Girona se presenta mañana en El Toralín, feudo de la Ponferradina, el quinto mejor local de la categoría y una de las claras revelaciones de este torneo. 

Viene de Segunda B, pero esto no le ha impedido ocupar el octavo puesto en la clasificación, más cerca del ascenso que del pozo.

La pólvora de Yuri 

Uno de los artífices del buen hacer de los del Bierzo es el incombustible Yuri de Souza. El delantero, a sus 37 años, es el ‘pichichi’ del equipo con 8 tantos. Lleva, además, cinco jornadas consecutivas viendo portería, partidos en los que su equipo siempre ha puntuado. Vive su undécima temporada en el club. Una auténtica leyenda de la ‘Ponfe’.