FÓRMULA 1

Ross Brawn se postula como sustituto de Ecclestone

Ross Brawn se encuentra en el centro de todos los rumores y su fichaje por Liberty Media para dirigir la F1 parece inminente

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Bernie y Brawn, hace unos años cuando estaba en Ferrari / sport

JOSEP VIAPLANA

Ross Brawn, director técnico de Ferrari, de 1996 a 2006, y team principal de Mercedes entre 2010 y 2014, puede convertirse en breve en el nuevo hombre fuerte de la Fórmula 1. El sensacionalista alemán Bild da ya por hecho que el británico será el sustituto de Bernie Ecclestone al frente del Mundial de F1, que la pasada semana celebró su 86º aniversario en México. Además, Ross Brawn dirigió el equipo Honda en 2008 y se lo quedó en propiedad en 2009 con la retirada de los japoneses, ganando su equipo con Jenson Button el título de 2009.

El equipo Red Bull, con Christian Horner al frente, agasajó a Mister E con un pastel en un acto privado al que además de los dirigentes del equipo de bebidas energéticas asistieron Niki Lauda y Toto Wolff. Ross Brawn ha desvelado recientemente en un libro que su marcha de Mercedes hace ahora tres años se produjo, precisamente, por desavenencias con Lauda y Wolff.

En México ya se especuló con la posibilidad de que Ross Brawn entrara en el equipo directivo de Liberty Media para encargarse de la gestión técnica del campeonato dado que a Ecclestone le han ofrecido que siga tres años, pero la apuesta de la firma americana por el inglés parece ir más allá y le quieren dar el mando de la F1 por sus conocimientos del Circo. Brawn, de 61 años, que mantiene también una relación de amistad con Jean Todt, presidente de la FIA, con el que trabajó durante una década en Ferrari, podría trabajar en los primeros tiempos mano a mano con Bernie para tener un trasvase de poderes tranquilo.

Hace ya algunas semanas que se está hablando de la posibilidad de que Liberty Media incorpore en su estructura a un primera espada de la F1 y entre los nombres que se han barajado han figurado los de Martin Whitmarsh (ex-McLaren), Stefano Domenicali (ex-Ferrari) y el de Ross Brawn. Precisamente, hace unos días el inglés realizó unas declaraciones al 'Telegraph' en las que expresaba su intención de "no volver a trabajar por una escudería, pero sería fascinante ayudar a la Fórmula 1 a mejorar. Este es el único desafío que me estimularía ahora para volver: La F1 tiene ahora la necesidad de un proyecto de tres años y otro de cinco, pero no existe la estructura ideal para crearlo e implementarlo en el tiempo".