El triplete exige hacer rotaciones

Luis Suárez, baja en el último entrenamiento antes del partido ante el Celta

 Luis Suárez no se entrenó con el resto de sus compañeros antes del partido ante el Celta / EFE

sport.es

Los tripletes exigen rotaciones. Dosificar la base del equipo titular para reservarla para el asalto de los títulos. Así ha sucedido cuando el FC Barcelona ha sido tricampeón en 2009, con Pep Guardiola en el banquillo, y en 2015, con Luis Enrique Martínez.

Ernesto Valverde, que aspira a llevar al equipo al tercer triplete de su historia, también transitará por la misma senda después de facilitar ayer la lista de convocados para el partido contra el Celta. Dejó en casa a ocho titualres.

El camino lo marcó el timonel de Santpedor en mayo de 2009, después del histórico gol de Iniesta en Stamford Bridge. Al Barça le quedaban seis partidos para bajar el telón, entre ellos la final de Copa y Champions y cuatro de Liga. El equipo de Pep fue con todo para cantar el alirón contra el Villarreal después de la gesta contra el Chelsea, pero un gol en el tiempo añadido del ‘submarino amarillo’ aguó la fiesta (3-3).

El Barça volvió a alinear a su once de gala en la final de Copa, que ganó 4-1 al Athletic en Mestalla. A partir de ahí echó el freno y reservó a los titulares (o más habituales) para la final de Roma. Entre otros, tuvo descanso Leo Messi, que se perdió los partidos contra el Mallorca y Osasuna (en ambos el Barça ya no se jugó nada). El argentino, de esta forma, volvió a la actividad en la final y en óptimas condiciones. El Barça no falló en el Olímpico y ganó 2-0. Uno de los goles llevó la firma del ‘10’.

Lucho, también

El técnico asturiano, para que el equipo llegara lo más fresco posible a la final de Berlín, solo tuvo un partido para dar descanso a sus jugadores: el del Deportivo en el Camp Nou. Luis Enrique dejó fuera del equipo titular, en la despedida de Xavi, a nueve intocables: Ter Stegen, Dani Alves, Mascherano, Piqué, Alba, Iniesta, Busquets, Rakitic y Suárez. El resultado no acompañó (2-2), pero días después se ganó la Champions League contra la Juventus (3-1).