El grito desesperado de Unai Emery en el descanso del 6-1

Al igual que en el partido de ida, Unai Emery preparó el partido de la Liga de Campeones del Camp Nou hasta el último detalle, con la idea de lograr cómodamentela clasificación para los cuartos de final.

El técnico pidió a sus jugadores trabajar en bloque, a 30/35 metros de su portería, según explica l’Équipe.

La consigna a Cavani era que estuviera cerca de los mediocampistas como Matuidi y Verrati y a los dos jugadores de banda, Draexler y Lucas debían apoyar a su correspondiente lateral. Sin embargo, a la hora de la verdad, los jugadores del PSG demostraron que no habían entendido para nada al técnico: ¿Había que atacar o defender?, ¿Cerrarse y salir a la contra o dominar?, ¿Defender atrás o presionar arriba?

El técnico, siempre según etas informaciones, intentó enderezar las cosas en el descanso del partido contra el Barcelona pero sin éxito. El Barça mandaba 2-0 y la situación empezaba a ser crítica para el PSG. Emery cogió la batuta en el vestuario: “Demostrarme que el partido de ida no fue un accidente, que podemos salir campeones de Europa". Así apretó emocionalmente a sus jugadores.

El técnico intentó también cambiar la actitud de su plantilla. Ya en la previa había dejado claro la necesidad de respetar al Barcelona, pero sobre el terreno de juego Emery interpretó que no era así.

"Escuchadme, Pese a que yo, en mi carrera, solo he jugado en la segunda división tengo mucha más experiencia que vosotros. Por lo tanto ¡escuchadme!”, dijo durante el descanso. Fue un grito de desesperación. El PSG mejoró tras el descanso, Cavani marcó el gol pero la debacle llegó en los instantes finales.