Las Guerreras, a por la revancha para alimentar una quimera

Al igual que hizo en la primera fase con una victoria ante las alemanas tras caer frente a la anfitriona Montenegro y contra Polonia, la selección española está obligada a rehacerse tras el drama del viernes si quiere apurar hasta el final sus escasas opciones de acceder a las semifinales del Europeo que coorganizan la citada Montenegro, Eslovenia y Macedonia del Norte.

La pelea intensa batalla a lo largo y ancho de los 60 minutos ante Rumanía se quedó sin premio por un despiste generalizado que permitió a Bianca Maria Bazaliu anotar un doloroso tanto sobre la bocina y solo unos metros por delante del círculo central que supuso el definitivo 29-28.

“Las chicas hicieron un gran esfuerzo y es totalmente injusto que no pudiésemos sumar ningún punto, pero el deporte es así y tenemos que aprender porque estas cosas también forman parte del crecimiento del equipo”, se lamentó a la conclusión del choque el seleccionador José Ignacio Prades sin poder esconder su decepción.

Esa última acción hizo revivir la pesadilla del referido duelo ante las polacas, cuando España llegó a ganar por 16-20 a 12 minutos del final y estuvo 10 minutos sin ver puerta para acabar cayendo por 22-21. Lo dicho, que las cuartas clasificadas en el pasado Mundial podrían llevar dos victorias más en este Europeo, o al menos una victoria (que no habría valido para la segunda fase al estar eliminada Polonia) y un empate que sí permitiría mirar hacia el futuro con algo más de optimismo.

¿Y ahora qué? Pues que las Guerreras tendrían que ganar este domingo a Países Bajos y el miércoles a la campeona olímpica Francia para tener opciones de estar en semifinales, aunque ni siquiera así dependería de sí misma y debería quedar pendiente de otros resultados.

Cuentas pendientes

España se medirá este domingo a las 18.00 horas a Países Bajos en un duelo con tintes de revancha tras lo sucedido en la final del Mundial de 2019, cuando las neerlandeses vencieron por un gol pese a que el equipo que dirigía Carlos Viver tenía la última posesión a 30 segundos del final. Una mala decisión y un discutible penalti dejaron a las Guerreras con una plata histórica.

Las figuras de aquel equipo eran la ausente ‘mamá’ Louis Abbingh y una Estavana Polman cuyo rol ya no es tan decisivo como hace cuatro años. Ahora los grandes peligros del conjunto neerlandés son Angela Malestein (tercera máxima goleadora del torneo con 24 goles) y Laura van der Heijden (21).