Una Copa de consolidación para el BAXI Manresa

El conjunto manresano afronta su segunda Copa del Rey en tres temporadas después de 18 años de ausencia

Pedro Martínez ha vuelto a configurar un bloque solvente después del experimento con gaseosa del curso pasado

El BAXI Manresa, esta temporada tras ganar en el Palau

El BAXI Manresa, esta temporada tras ganar en el Palau / SPORT.ES

David Rubio

David Rubio

Hace dos temporadas, el BAXI Manresa completó una proeza al clasificarse para la Copa del Rey 18 años después en la cuarta temporada en la Liga Endesa después del curso de penitencia en la LEB Oro que vivió en la campaña 2017-18.

De todas formas, ese proceso hacia la consolidación en la elite del baloncesto había empezado dos años y medio antes con la firme apuesta por Pedro Martínez, uno de los 'maestros' del baloncesto español que dos años antes había obrado su último 'milagro' alzando el título liguero con el Valencia Basket.

Su fichaje vino acompañado por una modernización del club a todos los niveles. La temporada 2019-20 se detuvo por el COVID y los manresanos quedaron fuera de la Fase Final Excepcional de 10 equipos por el 'basket-avetage', mientras que en la siguiente se quedó a una victoria de la Copa del Rey y de los play-off.

En la temporada 2021-22 el club acertó de pleno con los fichajes y Pedro Martínez supo crear un bloque solvente que regresó a la Copa del Rey (cayó en cuartos contra el Barça) y a los play-off con dos derrotas contra el Madrid en la primera ronda.

Pedro Martínez es un seguro de solvencia en el banquillo

Pedro Martínez es un seguro de solvencia en el banquillo / EFE

Sin embargo, la temporada pasada fue un experimento con gaseosa que pudo costar muy caro. El club no pudo o no supo conservar a casi ninguno de sus referentes y lo pasó realmente mal para salvarse sin los Francisco, Bako, Moneke, Sima, Thomasson y compañía. El técnico supo hacer piña para que el equipo no se cayese y la llegada de Devin Robinson hizo el resto.

Ese pose que adquirió el BAXI Manresa fue determinante para una madurez que está mostrando en el curso actual con fichajes acertados y el crecimiento de jugadores jóvenes como el canterano Musa Sagnia o un Marcin Steinbergs al que el técnico he hecho crecer como hizo por ejemplo Carles Duran con Birgander en la Penya.

Con un presupuesto muy inferior al del Baskonia e incluso al del Joventut (ambos ausentes en la Copa), el conjunto del Bages está realizando un baloncesto alegre con varios 'pesos pesados'. Pese a que a veces 'desaparece', Robinson sigue siendo determinante junto al joven senegalés 'Papi' Badio, un base al que hizo debutar en la elite Jasikevicius en el Barça.

Son los dos únicos nombres propios que sobresalen junto a la dirección y a las asistencias de Dani Pérez. Ahí radica una de las claves del éxito del BAXI Manresa, en la fuerza y la solvencia de un bloque en el que todos aportan en base a su rol. Martinas Geben y Sagnia rebotean, Vaulet es la garra y el 'chico para todo', mientras que Brandon Taylor y Steinbergs también son importantes en ataque.

Devin Robinson ataca a Jabari Parker en el Nou Congost

Devin Robinson ataca a Jabari Parker en el Nou Congost / EFE

Mención especial también para un Pierre Oriola que vuelve a sonreír tras un calvario por problemas de espalda. Oro mundial con España en 2019 y campeón liguero en 2017 con el Valencia Basket y en 2021 con el Barça, el cuatro veces ganador de la Copa del Rey ha asumido su rol de especialista sin rechistar.

El ala-pívot de Tàrrega, de 31 años, promedia 11 minutos por partido y poco a poco va recuperando sus señas de identidad: la pelea, la lucha por el rebote y la inteligencia en ataque. Aunque hace poco más de dos años que dejó el Barça, de aquella época solo tendrá enfrente en los cuartos de final a Laprovittola, a Jokubaitis y a Abrines, además de los jóvenes Nnaji y el recién recuperado Caicedo.

Una muestra de la solidez del equipo es que de sus 12 victorias en la Liga Endesa, tres se produjeron por un solo puntos (entre ellas el 82-83 en el Palau) y otras cuatro llegaron por seis puntos o menos. De hecho, es el único de los ocho clasificados que logró su billete copero sin basket-average general favorable (1427 puntos anotados por 1432 encajados).

28 años de aquella gran noche murciana

El 25 de febrero de 1996, el BAXI Manresa (TDK por entonces) vivió en el Palacio de los Deportes de Murcia su noche más gloriosa hasta entonces con la conquista de la Copa del Rey en una apasionante final frente al Barça de Aíto García Reneses (94-92).

Creus anotó el triple de la victoria en la final copera de 1996

Creus anotó el triple de la victoria en la final copera de 1996 / TWITTER

Aquella final se decidió en la prórroga con un protagonista de excepción. Al borde de la cuarentena, Joan 'Chichi' Creus asumió la responsabilidad en el último ataque con 91-92 para inventarse un triple sideral que dio a los del Bages el primer título de su historia.

Salva Maldonado fue el técnico 'milagro' en un equipo que dos temporadas más tarde alzó el título liguero con otro emblema del club como Luis Casimiro, quien 26 años después logró la salvación del Betis pese a la caótica política del club.