Semenya descarta correr los 200 y se centra en las distancias largas

La atleta explicó el cambio de estrategia tras vencer en la prueba de 5.000 metros en el Campeonato de Atletismo de Sudáfrica

"Me hago mayor, tengo miedo de desgarrar mis músculos", explicó la sudafricana en declaraciones que recogió la televisión pública SABC

Semenya durante una competición

Semenya durante una competición / AFP

EFE

La doble campeona olímpica de 800 metros Caster Semenya, enfrentada a la Federación Internacional de Atletismo (World Athletics) por las normas sobre testosterona, confirmó hoy que no intentará la clasificación olímpica para la prueba de 200 metros, sino que se centrará en distancias más largas.

La atleta sudafricana explicó el cambio de estrategia tras vencer en la prueba de 5.000 metros en el Campeonato de Atletismo de Sudáfrica, celebrado este jueves en Pretoria, con una marca de 15:52.28 (aún 42 segundos por encima del tiempo de clasificación automática para los Juegos Olímpicos de Tokio en esta modalidad). "Tuvimos que mirar si podía hacer 200 metros durante los próximos cinco años. No iba a nuestro favor", explicó la corredora en declaraciones a los medios durante el torneo, según recogió la televisión pública sudafricana SABC. "Me hago mayor, tengo miedo de desgarrar mis músculos. Tuvimos que sentarnos y asegurarnos que la decisión tomada tenía sentido. La distancia tiene sentido", agregó.

La corredora, privada de competir en las distancias en las que es especialista debido a la normativa de World Athletics sobre los límites de testosterona en mujeres (a menos que se medique por su hiperandrogenismo), espera que una futura prueba oficial en la urbe sudafricana de Durban pueda darle la clasificación olímpica (a nivel del mar la dificultad será menor que hoy en Pretoria) en 5.000 metros.

También planea competir en eventos en Europa este año con el mismo objetivo, pero Semenya puntualizó que está "feliz" y divirtiéndose con el entrenamiento, sin estresarse demasiado por asegurarse la participación en Tokio. "Si no, no es el fin del mundo. Para mí no va de ir a los Juegos, va de estar sana y correr buenos tiempos y estar en las pistas el mayor tiempo", recalcó.

La batalla judicial sobre la normativa oficial de los límites de testosterona sigue, no obstante, abierta, ya que la campeona sudafricana llevó el caso ante el Tribunal Europeo de Derechos Humanos el pasado febrero.

Este es su tercer intento de tumbar, por la vía legal, la polémica normativa con la que la Federación Internacional de Atletismo obliga desde 2019 a las atletas a mantener los niveles de testosterona por debajo de los 5 nanomoles por litro durante un periodo continuado de al menos seis meses para competir en pruebas de entre 400 metros y una milla (unos 1.600 metros).

De no hacerlo, las atletas "con disfunciones en su desarrollo sexual", como las describe World Athletics, deben tratarse médicamente, cambiar de prueba o competir como hombres. De los casos de atletas con hiperandrogenismo, el de la sudafricana Semenya, doble campeona olímpica y triple mundial de 800 metros, es el más conocido.

Semenya, muy querida en su país y en África, alega que la normativa es discriminatoria, que viola la ética de la medicina -por obligar a gente sana a medicarse- y que atenta contra los derechos humanos.

En los más de dos años transcurridos desde el anuncio de la normativa, la corredora sudafricana ya perdió un proceso ante el Tribunal de Arbitraje Deportivo (TAS) y un recurso posterior ante la Justicia ordinaria de Suiza (país donde tiene su sede el TAS).

En este contexto, en marzo de 2020 Semenya anunció que intentaría entrenarse para disputar la prueba de 200 metros en a Tokio, estrategia que ahora abandona en favor de distancias más largas.