Iker, dentro y bajo El Larguero

Que no, que no se piensa marchar. Iker Casillas pasó el martes por la SER para dejarle bien claro a José Ramón de la Morena (e imagino que también a Florentino) que no se piensa largar. Por mucho que David de Gea se venga a vivir a Madrid, Iker se mostró rotundo en diversas ocasiones, la primera al empezar afirmando “quiero acabar mi carrera aquí”. La entrevista adoptó un tono íntimo al impregnarse del lugar y momento en que se realizaba. Fue a las 12 de la noche, en directo desde el estadio de Santiago Bernabéu. Empezaron saliendo del túnel de vestuarios (ahí de la Morena se ahorró la broma fácil) y se sentaron bajo el larguero. Afrontaron todas las patatas calientes (Ancelotti, los pitos, la temporada en blanco) en incluso se le pareció escapar que se había despedido del italiano el sábado, dos días antes de su cese. Matizó que se “despedía de esta temporada”.

Pero siempre que se habla del Madrid reciente aparece el Atila del banquillo, ese hombre cuyo paso por la Casa Blanca sigue marcando el club. “¿Dónde se rompió la química con Mourinho? ¿Sabemos la historia real?”. Iker repitió el relato ya conocido de la llamada a Xavi recordando que tenía buena relación con su ex-entrenador hasta el extremo de enviarle mensajes con “coñas y risas” cuando España eliminó a Portugal. Pues a lo mejor no le sentó muy bien.