El Barça pierde pero sabe competir

La reacción del Barça en Estambul fue ineficaz. Le faltó un poco de suerte al final para acabar ganando al Efes. Pero la realidad es que el dominio turco durante los tres primeros cuartos fue total. No pueden, y no deben, los blaugrana dar tantas facilidades en una pista tan difícil. Desde el salto inicial, los hombres de Perasovic jugaron con una mayor intensidad y ambición. Otra vez, la enésima, el Barça tropezó en la piedra de la falta de mentalidad y carácter.

No obstante, en esta ocasión, tuvo la virtud de no bajar los brazos e ir recuperándose anímicamente conforme avanzaba el duelo. Una cualidad básica si el equipo aspira a entrar en los cuartos de la Euroliga. Por otra parte, es preciso que los jugadores se confabulen para salir siempre “enchufados” en todos los partidos. Dar tanta ventaja al rival se paga muy caro. Y un nuevo “cinco” empieza a ser urgente.

NAVARRO A PUNTO

Un momento que levanta expectación. Por una parte, Bartzokas y todos sus compañeros están deseosos de poder contar con la aportación de su capitán. Por otra, también se está pendiente del actual estado físico de Navarro y de la continuidad que tendrá su juego. No hay duda que su ascendencia en el grupo es enorme, y que en muchas ocasiones él ha sido quien ha liderado el juego blaugrana.

La baja de Pau Ribas aún hace más necesaria su incorporación, aunque el fichaje de Renfroe ya le ha permitido al técnico del Barça jugar con la pareja Rice-Renfroe al mismo tiempo. Un pequeño puzzle de piezas que bien gestionadas deben lograr que el perímetro del equipo, si le sumamos además a Perperoglou, Oleson, Koponen y Claver, sea poderoso. Un objetivo imprescindible si los blaugrana quieren optar a entrar entre los ocho primeros del grupo.