Ante Croacia, con los cinco sentidos

España buscará una plaza para luchar por las medallas ante Croacia en el Mundial de Francia (mañana, 20.45). Esto supone un problema para los de Jordi Ribera. Un problema porque los croatas son buenos en todo. No tienen apenas grietas en su juego y es complicado sorprenderles. 

Los 'Hispanos' deberán pues jugar con los cinco sentidos ante los croatas. Una de las claves será recuperar la regularidad defensiva que perdieron ante Brasil. Es la principal seña de identidad de la selección española, en lo que basa su poderío y su capacidad para superar a los rivales. Si España flaquea en defensa, toda la estructura se tambalea. Pero hay que aprender de los errores, y seguro que Ribera tomó nota del partido ante su anterior equipo y ha estudiado minuciosamente qué pasó, dónde se falló y ha hallado la solución. "Tenemos que recuperar las sensaciones defensivas", insistió el mister.

Será básica la defensa porque Croacia cuenta con un ataque demolidor. Al margen de un lanzador como Luka Stepancic hay que vigilar muy de cerca a los centrales Domagoj Duvnjak y Luka Cindric, dos peligrosos jugadores que nutren constantemente de balones a los extremos y al pivote para habilitarles lanzamientos de gol en acciones muy rápidas que desorientan a las defensas rivales.

Otro de los handicaps con los que se va a encontrar el equipo español es con ese ataque con siete jugadores al que le está costando adaptarse. Como ya ocurriera ante Macedonia, Croacia montará sus bazas ofensivas atacando sin portero, con lo que la zaga hispana tendrá que tirar de alta concentración y contundencia para contrarrestarla.

Los atacantes de la selección española se encontrarán además con un auténtico muro defensivo con Jakov Gujon y Zeljko Musa, de 2,04 y 2,00 metros respectivamente, que les obligará a trabajar más con los jugadores exteriores porque superarles por encima es tarea casi imposible. Y ya no hablemos del contrataque, que lo montan rápido tras el mínimo error del rival y llegan a gran velocidad a la portería contraria.

españa le tiene la medida tomada

Pero no todo son malas noticias. La selección española tiene argumentos más que suficientes para superar a esta auténtica máquina de balonmano. De entrada, en los dos últimos enfrentamientos en competiciones importantes España superó a Croacia. Manolo Cadenas le tenía tomada la medida al conjunto balcánico y en el Europeo de 2014, disputado en Dinamarca, los 'Hispanos' les superaron en el partido por el bronce, bajándoles del podio tras el ajustado 29-28 final.

En el Europeo del año pasado, el combinado nacional también venció a los croatas en las semifinales. La selección española superó a Croacia por 33-29. España acabó colgándose la medalla deplata tras perder ante Alemania, mientras que los croatas completaron el podio al imponerse a Noruega.

Unos antecedentes que alimentan el optimismo de cara al partido de cuartos de final ante Croacia. La España ahora dirigida por Jordi Ribera tendrá un duro trabajo desde el minuto uno al sesenta y tal y como concreta el entrenador "debemos darle mucha continuidad a nuestro juego de ataque". 

L'Arena de Montpellier espera a dos titanes del balonmano, solo uno seguirá en competición. Es a todo o nada.