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"El mar y yo no somos muy compatibles"

Líder del Mundial y piloto de ‘ciencia ficción’ con un carisma que ha sabido mantener a toda costa, Marc Márquez nos recibe en Cervera, donde carga pilas en el parón estival

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Josep Viaplana / Laura López

Tras ganar el GP de Alemania y liderar el Mundial con autoridad, ¿es hora de las vacaciones?

Puedo hacer vacaciones, desde luego, pero la gente piensa que son largas porque hay tres fines de semana sin carreras de motos y lo máximo que puedes hacer es una semana o diez días. Cuando vuelves tienes que estar bien físicamente y para ello hay que seguir entrenando y mantener las rutinas de siempre.

¿Es fácil desconectar?

Siempre me cojo una semana para desconectar por completo, no hago nada. Me gusta alquilar una casa con los amigos y no moverme mucho de ahí después de todo el año viajando.

¿Tus vacaciones son activas?

Durante la semana que me tomo vacaciones me apetece no hacer nada, estirarme un par de horas en el sofá o en una hamaca en la sombra. Es la forma de desconectar.

¿Qué puedes hacer en el periodo de vacaciones o qué te gusta hacer que no puedes hacer el resto del año?

En vacaciones, sobre todo en verano, el día se alarga. Habitualmente mis amigos quedan tarde para cenar o se van a tomar algo por la noche y debo sacrificarlo porque es mejor ir a dormir temprano y levantarse pronto para entrenar, pero en vacaciones sí les puedo acompañar y no tengo un horario tan marcado.

¿Hay bastante con una semana?

Me gustaría al menos hacer un par de semanas porque no es lo mismo unas vacaciones en verano que en invierno. Este año el calendario es raro. Ha habido parones de dos fines de semana, pero no son vacaciones y a lo sumo te puedes coger un par de días. Me gustaría que fueran más largas, pasan muy rápido.

¿Añoras lo que hacías antes de dedicarte profesionalmente a las motos?

La ventaja que tengo y que, probablemente, tienen muchos pilotos que competimos en el Mundial desde jóvenes, es que a la edad que se empieza a salir con los amigos ya he vivido esta realidad y el cuerpo se acostumbra. Mirad, lo que más añoro, es que hace tres o cuatro años podía ir a un sitio con los amigos y no tenía que pensar si podía ir o no, si habría mucha gente, o si habría un sitio tranquilo y apartado. La gente es un factor que te influye a la hora de decidir donde vas.

¿Buscas la tranquilidad, pasar desapercibido?

No puedes ir a todos los sitios a los que te gustaría. Cuando te reconocen la gente te pide una foto y, claro, pese a que estés de vacaciones no les puedes decir que no.

Mucha gente espera las vacaciones para viajar…

Si los extranjeros vienen de vacaciones a nuestro país por qué tengo que irme. Todo el Mediterráneo, incluyendo las islas, es fantástico en verano. Es bonito, hay rincones paradisíacos, se come bien, el ambiente es excelente y estás en casa. Prefiero quedarme cerca que hacer grandes viajes.

¿Cuántas veces has entrado en una discoteca y se ha parado la música?

Parar la música no, pero sí que ha pasado que todo el mundo deje de bailar y se vuelva hacia ti para mirarte... Trato de entrar en los locales con discreción, rodeado de mis amigos y la verdad es que casi siempre voy a sitios en los que ya conozco, con entrada discreta.

¿Cómo eran tus vacaciones de infancia?

Las recuerdo con mucho cariño. Estábamos bastante por Cervera y salíamos pocos días fuera. Mis padres tenían que coger fiesta durante el año para poder llevarme a entrenar o correr y sacrificaban sus vacaciones. Hacían una semana en verano o incluso menos, pero no faltaba una jornada en la playa y en los parques acuáticos, que nos entusiasmaban.

¿El mejor verano de tu vida?

Es muy diferente ahora que cuando eras pequeño. Todo tiene su momento.

¿De pequeño?

Cuando empecé con Monlau y Alzamora, a los 12 años, conocí a Pío Ventura, que era el propietario de la escuela y que murió en un accidente de avioneta. Me invitó a ir en su barco. Fue la primera experiencia en el mar. Fue un verano muy especial.

Eso sí que era vida

Sí, sí… podías ir dónde querías, con quién y cuándo querías.

¿Alguna anécdota más recientemente?

Muchas… pero que se puedan explicar ya no tantas. El primer verano que hice con los amigos, entre los que había mecánicos del equipo, nos fuimos a Tarifa y me encantó. No lo negaré, cuando salía el sol era cuando nos íbamos a dormir.

¿Qué hobby te gusta?

No soy muy fan del mar, el mar y yo no somos muy compatibles. Hago motocross durante un par o tres días y eso para mí ya es desconexión. La siguiente semana ya es más de vacaciones, de relax, de fiestas.

¿Cómo te imaginas un verano dentro de 20 años?

Especular con el futuro es difícil, pero con 43 años podría haber una familia, con niños.

¿Un paraíso para perderse que recomendarías?

Menorca. Tienes que andar una hora o más para llegar a algunas calas, pero una vez allí hay poca gente. Playas preciosas, tranquilidad, buen clima... y está aquí al lado.