Berbatov, entre la Premier y la Bundesliga

Dimitar Berbatov, de 34 años y que no fue renovado por el Mónaco al acabar la última temporada, permanece a la espera de concretar su futuro, manteniendo, de acuerdo a diversas informaciones, contactos con el Aston Villa y el Bornemouth de Inglaterra y el Werder Bremen de Alemania.

Considerado el mejor futbolista búlgaro desde la época de Hristo Stoichkov, Berbatov protagonizó en su día el fichaje más caro de la historia del Tottenham, que en el verano de 2006 pagó al Bayer Leverkusen 16 millones de euros. Conocido como Berbagoal, comenzó en las categorías inferiores del Pirin Blagoevgrad hasta incorporarse con 17 años al CSKA de Sofía en el que había jugado su padre.

Hincha del Milan desde la niñez y del Newcastle desde que descubrió en el equipo a Shearer, la carrera de Berbatov pudo dar un vuelco cuando en 2001 estuvo a punto de ser fichado por el Lecce, que acabó eligiendo a Vucinic porque el Bayer Leverkusen pagó 1,8 millones de euros al CSKA.

Su impacto con el club de la aspirina fue inmediato, convirtiéndose en uno de los futbolistas más queridos por la hinchada del Bay Arena por su exquisita calidad y frialdad ante las defensas contrarias. Subcampeón de Liga, Copa y Champions en la temporada 2001-02, la marcha de Ballack primero y Lucio después al Bayern le catapultó al liderazgo, a pesar de su juventud, del equipo.

Hasta que en junio de 2006 el Tottenham aprovechó el descenso de la Juventus, que provocó el fichaje de Ibrahimovic por el Inter y cerró la puerta a Berbatov, quien desembarcó en White Hart Lane como el fichaje más caro (16 millones de euros) en la historia del club y viviendo un idilio continuado con los aficionados.

Con los Spurs permanceció hasta agosto de 2008. Llegó a jugar el primer partido de Premier de la temporada 2008-09, frente al Middlesbrough, y tras una serie de acusaciones del club londinense por las malas artes de Alex Ferguson en su interés por hacerse con él, fichó por el Manchester United por 38 millones de euros el último día del mercado, ocupando la plaza de Louis Saha y convirtiéndose en el tercer fichaje más caro de la historia de los diablos rojos por detrás de Ferdinand y Verón.

Su exquisita calidad, sin embargo, no encontró acomodo en Old Trafford, donde el fútbol de un Berbatov que podría compararse a Ibrahimovic no casó con el rudo carácter de Alex Ferguson, descendiendo sus cifras goleadoras al lado de Rooney y viendo como su papel indiscutible era puesto en duda primero por Michael Owen, después por Chicharito Hernández y finalmente por Danny Welbeck a su regreso de la cesión en el Preston.

Así, el 31 de agosto de 2012, diez días después de que el Manchester United hubiera pagado 30,7 millones al Arsenal por Van Persie, Berbatov fue traspasado al Fulham por 5 millones, para convertirse en el ídolo de la afición de Craven Cottage.

Los 15 goles que marcó en la Liga de la temporada 2012-13 fueron trascendentales para que el Fulham salvase la categoría y en enero de 2014, con los cottagers luchando por mantenerse en la Premier, <strong>la lesión de Falcao en el Mónaco</strong> provocó su pase al club del <strong>Principado</strong>, liberado de forma extraña por el club londinense. Al final de la temporada el Fulham, fuera del descenso cuando se marchó Berbatov, descendió a la Championship.

Ahora, acabada su etapa en el Mónaco, el Aston Villa estudia su fichaje como sucesor de Benteke, a la vez que el Bornemouth, ascendido por primera vez en su historia a la Premier, piensa en él como jugador franquicia. En Alemania el Werder Bremen le tiene, como a Pizarro, entre los posibles sucesores de Di Santo, traspasado al Schalke por 6 millones de euros.

Por si acaso, Berbatov mantiene en la recámara tres opciones fuera de Europa. En la MLS mantiene una oferta del Seattle Sounders y el interés del Vancouver Whitecaps; en Qatar las puertas están abiertas y desde India ya le han llegado dos ofrecimientos de la SuperLiga que se disputará entre octubre y diciembre. Un torneo menor... Pero que le ofrece cerca de un millón de euros para quedar libre en enero.

Sea cual sea su destino, Berbatov siempre será un delantero para recordar, como queda patente en este video: