A BALÓN PARADO

Con Messi no hay quien pueda

Munir, junto a Messi y Neymar

Munir, junto a Messi y Neymar / Marc Casanovas

Manolo G. Crespo

Guardiola ya lo dijo en 2009 cuando se especulaba que Florentino podía pagar los 150 millones de cláusula de Messi: “A mí de Leo solo me preocupa que esté feliz.” Eso a día de hoy tendría que seguir siendo así. No hay duda que él, a un porcentaje de rendimiento inferior al de sus mejores años, le da para seguir siendo decisivo, marcando un montón de goles y para llevar al Barça a disputar todas las competiciones. 

De todas formas a Leo hay que cuidarlo mucho y más cuando desde la caverna las campañas son que Cristiano es infinitamente mejor, que es el más guapo y todo son críticas deportivas y extradeportivas (Hacienda, vómitos, etc) contra él.

Aparte de los ataques externos tampoco se debería derrocar a Leo desde dentro. Desde que llegó Neymar, o ahora Suárez, se le envía un mensaje de que, por si no está a su nivel o entra en declive, mejor tener a otros goleadores. 

Da igual. Messi sigue siendo mucho Messi. Por mucho que se diga, él siempre ha podido con todos. Desde que el 2007 se fichó a Henry han llegado más goleadores como Villa, Ibrahimovic, Alexis, Neymar o Suárez. Sin contar este año, estos jugadores marcaron en esos siete años en el Barça un total de 180 goles y en ese mismo periodo Leo ha conseguido el solito un total de 328. Messi es irrepetible y por mucho que se le quiere hundir, este año puede volver a marcar cerca de 50 goles sin contar los que dará y lo que seguirá haciendo jugar al equipo. Por eso... mejor que esté feliz.