No juguemos con fuego con Messi

¡peligro! El Barça ha fracasado, se ha acabado un gran equipo y en la hora del examen final, un factor decisivo, el factor Messi, aparece peligrosamente en las críticas. Cierto es que Leo ha estado lejos de sus estratosféricos números y actuaciones de años anteriores, pero en ningún modo se le puede responsabilizar del fiasco deportivo. Si solo nos atenemos a los problemas del equipo, yo diría que a Leo le ha faltado el acompañamiento de los grandes futbolistas que en su momento le hicieron el mejor jugador del mundo. Para entendernos, ni Xavi ni Iniesta han tenido tampoco su mejor temporada. Y el Tata Martino tampoco ha ayudado con las variantes tácticas. Si a ello unimos el agujero en el centro de la defensa y en la portería después de la lesión de Valdés, encontraremos causas de la catástrofe mucho más sólidas que el pretendido derrumbe de Messi.

Miren, para atacar e intentar desestabilizar a Messi ya están los enemigos del Barça, mayoritariamente los altavoces de la meseta, que alguna mella habrán hecho ya en el ánimo de la afición cuando las encuestas empiezan a señalar a Leo. Creo que estamos entrando en una dinámica muy peligrosa. Estos desamores acaban siempre mal, que es como han acabado siempre los grandes cracks que en la historia han vestido de blaugrana.

Messi ha tenido un mal año y pese a ello ha marcado ¡41 goles! Una mala pretemporada, una lesión y el bajón del equipo no le han ayudado. Puede que también tenga la cabeza en el Mundial, no lo descartaré, pero de ahí a pensar que es prescindible media un abismo. A sus 26 años está en la mejor edad de un futbolista, perder al mejor jugador del mundo por culpa de los calentones irracionales del fútbol sería un pecado mortal. No juguemos con fuego, Leo ha de ser el líder del nuevo ciclo, sin ninguna duda.