Jonas Gutiérrez: "El cáncer es el partido más difícil que me ha tocado jugar"

Tres semanas después de que la afición argentina se estremeciera con las revelaciones del exfutbolista Gabriel Batistuta, que dijo que había pedido a los médicos que le amputaran las piernas por culpa del dolor que sentía, Jonás Gutiérrez tomó el relevo de ‘Batigol’. También en televisión y en una hora de máxima audiencia, el internacional argentino relató su lucha contra un cáncer de testículo que le ha apartado momentáneamente del fútbol.

“Me detectaron un tumor en un testículo. Cuando me confirmaron el cáncer, fui a casa llorando”. Entero y sin titubear, el ex de Vélez y Mallorca y todavía bajo contrato con el Newcastle, relató su experiencia al canal TyC Sports. “Al principio sentía dolor después de un choque en un partido ante Arsenal, después noté que se me empezó a inflamar y ahí fue cuando me hicieron una ecografía. Me detectaron el tumor y me dijeron que me tenía que operar al otro día. Al principio no entendía y pregunté si era cáncer y me dijeron que sí. Fue muy fuerte. Me extirparon un testículo en octubre”, explicó sobre el suceso ocurrido en mayo de 2013.

En enero de este año, después de su operación en Buenos Aires, que se pagó él “a pesar de tener contrato con el Newcastle”, Jonás volvió a Inglaterra para reincorporarse a la plantilla de los ‘magpies’. Sin embargo, el entrenador Allan Pardew le cerró las puertas después de haber sido titular durante las cinco temporadas que jugó en el equipo y le mandó a préstamo al Norwich. “Pardew me dijo que la mejor salida era buscarme otro equipo. Me sorprendió porque en cinco años jugué siempre”, relató ‘El Galgo’, aún bajo contrato con el club de St. James’Park.

En Norwich, Jonás jugó algunos partidos hasta que se lesionó el gemelo y cuando iba a volver a jugar descubrió un dolor en sus riñones, en los que le descubrieron ganglios. Otra vez volvió a Argentina para someterse a las sesiones de quimioterapia. “Por suerte este partido se está terminando. Es el partido más difícil de mi vida pero como todo, tiene un final”.

Gutiérrez explicó que uno de los mayores traumas supuso la caída progresiva del pelo hasta quedarse calvo, una imagen que contrasta con la habitual coleta con que le identifican los aficionados. “Fue duro encontrarme con que se me caía el pelo. Yo no me lo quería cortar, quería aguantar”. Los amigos de Jonás no le dieron la espalda y los más cercanos se raparon la cabeza para acompañarlo en sus primeras sesiones de quimioterapia. “Él siempre respetó lo que es el valor de la amistad, y sus compañeros me dijeron que era la única manera que tenían de hacerle sentir lo que le querían y lo que le respetaban”, contó la madre del futbolista, Mónica, al programa ‘Todo Pasión’.

La madre del futbolista está convencida de que su hijo volverá a jugar. “Él es un luchador. Sabemos que todo esto le sirve para crecer y evolucionar como ser humano”.