La compañía francesa de ferrocarril denunciará el incidente de la Paris Roubaix

No siempre el deporte es un ejemplo. En la localidad francesa de Wallers, decenas de ciclistas participantes en la Paris Roubaix decidieron saltarse un paso a nivel, arriesgando su vida pese a las indicaciones del gendarme alertándoles de que se acercaba un tren de alta velocidad (TGV).

Las imágenes, que han dado la vuelta al mundo, han causado un profundo malestar en Francia y especialmente entre los directivos de la compañía gala de ferrocarriles (SNCF), que ya ha advertido su intención de denunciar los hechos para que sea un tribunal el que depure responsabilidades.

"Varios ciclistas han traspasado deliberadamente las vías, a pesar de que la barrera había bajado y millones de telespectadores han comprobado en directo esta extremadamente grave e irresponsable infracción, que habría podido tener consecuencias trágicas. Actuaciones de este tipo son, como mínimo, susceptibles de una sanción por vía penal", dice la nota emitida por la compañía, que subraya que acciones similares costaron la vida de 29 personas a lo largo de 2014.

El reglamento ciclista especifica que los corredores deben detenerse ante un paso a nivel cerrado. En 2006, también en la Paris Roubaix, una situación parecida acabó con varios corredores expulsados.