Junto a Cesc y Deco

Rakitic alcanza el podio de los centrocampistas más rentables del Barça

Ivan Rakitic acumula unos importantes registros en su primera temporada en el Barça, que demuestran su rápida adaptación y le permiten colocarse entre los mediocampistas fichados por el club a lo largo del siglo XXI que mejor rendimiento ofrecieron en su primer curso

Rakitic supera los registros de la mayoría de medios fichados por el Barça en el siglo XXI

Rakitic supera los registros de la mayoría de medios fichados por el Barça en el siglo XXI / sport

Alfonso Callejas

Los números de Ivan Rakitic en su primera campaña en el Barça empiezan a ser más que respetables. Más allá de las buenas sensaciones que deja sobre el terreno de juego y su trascendencia en el sistema utilizado por Luis Enrique, el centrocampista croata acumula unos registros –cinco goles y siete asistencias– más que óptimos para un interior organizador. A estas alturas de temporada y tras su gol y asistencia a Luis Suárez en el triunfo en Granada, Rakitic registra un total de cinco goles –cuatro en Liga y uno en Copa– y siete asistencias en lo que va de campaña.

En lo que respecta a los centrocampistas fichados por el Barça en el último siglo, sus números permanecen únicamente a la sombra de dos futbolistas TOP como Deco y Cesc, que en su momento desembarcaron en el Camp Nou como auténticos cracks de primer nivel. A lo largo de este nuevo siglo hay pocos centrocampistas fichados por el Barça que en su primer curso como azulgrana mejoren los registros ya alcanzados por Rakitic a finales de febrero. 

Jari Litmanen fue el último medio incorporado por Louis van Gaal a las puertas del nuevo siglo en el verano de 1999. El mediapunta finlandés fue una apuesta fuerte del técnico holandés para el que sería el último curso de su primera etapa en Barcelona (1997-2000). Las lesiones mermaron totalmente el potencial de Litmanen aunque en su primera temporada como azulgrana cosechó cuatro tantos –tres en Liga y uno en Copa– antes de abandonar el club por la puerta de atrás la campaña siguiente para poner rumbo al Liverpool.

GERARD, MENDIETA Y RIQUELME

Otros futbolistas recién llegados al club tampoco mejoran los números de Rakitic. Simao Sabrosa apenas vio portería en sus dos únicos cursos en Barcelona –uno y tres goles–, en la misma línea que un Emmanuel Petit que pasó con más pena que gloria por la ciudad condal en su única campaña como azulgrana pese a llegar procedente del añorado Highbury con la etiqueta de campeón del Mundo. Un único tanto en Liga fue su pobre bagaje pese a su millonario traspaso desde el Arsenal junto al también cuestionado Overmars.

Ese mismo verano del 2000 el Barça de Gaspart también tiró la casa por la ventana para repescar a Gerard López. Cuatro goles –dos en Liga, uno en Copa y uno en la UEFA– fueron su discreto bagaje en su mejor campaña de largo de las cinco que militó como azulgrana. Un regreso más que discreto, tanto o más que el de Iván de la Peña, que tampoco pudo triunfar tras volver cedido al Camp Nou esa misma campaña. 'Lo Pelat' regresó a Italia de vacío, sin títulos y sin goles en su haber.

El siguiente curso (2001-2002) desembarcarían en Barcelona futbolistas de talento más que discutible como los brasileños Rochemback y Geovanni Deiberson. Ambos dejaron mucho que desear pese a que el rocoso centrocampista firmó tres tantos –dos en Liga y uno en Champions– en su primera campaña. La historia a nivel estadístico mejoraría ligeramente el verano siguiente con la llegada de Mendieta y Riquelme. El ex del Valencia, que llegaba cedido por la Lazio para relanzar su carrera tras el Mundial de Corea y Japón, acumuló seis tantos –cuatro en Liga y dos en Champions– debido, en buena medida, a su facilidad en el golpeo a balón parado y su ascendencia en los lanzamientos de penalti. La otra incorporación ilustre del curso, el mediapunta argentino Juan Román Riquelme, también sumó seis tantos –tres en Liga, uno en Copa y dos en Champions– en una campaña muy convulsa en la que no contó con la confianza de Van Gaal y no llegó a remontar el vuelo de la mano de Radomir Antic.

DECO Y VAN BOMMEL, HÉROES DE LA 'SEGUNDA'

Con la llegada de Joan Laporta a la presidencia y el inicio de la 'era Ronaldinho' entran en escena otras caras nuevas como los pivotes Edmilson o Davids y Albertini –ambos disputando tan solo media temporada– que no mejoran los registros de Rakitic en su primer curso. Incluso futbolistas ofensivos como Quaresma (1), Maxi López (1), Ezquerro (4) o Larsson (4) –sufrió una grave lesión en su primer curso– tampoco mejorarían las cifras goleadoras de Rakitic en sus respectivas primeras temporadas. 

Ezquerro sería uno de los dos fichajes a coste cero que el Barça realizaría el verano del 2005 en la antesala de la conquista de su segunda Champions. El otro sería el de Mark van Bommel, procedente del PSV. El medio holandés firmaría cuatro tantos –dos en Liga, uno en Copa y otro en Champions– en su primer y único curso como azulgrana. Tiempo suficiente para ganarse la titularidad en la gran final de París, ante la grave lesión de Xavi y la juventud de Iniesta, junto a un auténtico coloso de la medular como Deco. El luso, que llegó en 2004 tras ganar la Champions con el Oporto y brillar en la Eurocopa de Portugal, había acumulado nueve tantos –siete en Liga y dos en Champions– en una primera temporada para enmarcar que devolvió al Barça a la senda de los títulos.

KEITA Y CESC, LOS ÚLTIMOS ILUSTRES

Pasarían varios años hasta volver a ver cuajar en el club a un centrocampista foráneo. Yayá Touré sería el encargado de romper la dinámica pese a que sus registros goleadores fueron más que discretos  en su primer curso –un gol en Liga y otro en Champions– debido a que era ubicado como pivote defensivo, a diferencia del rol más adelantado del que goza en la actualidad en el Manchester City. Diferente sería el caso para otro portento físico como Seydou Keita. El malí se desató como interior y siempre ofreció muchos recursos al equipo, dando equilibrio y aportando mucha llegada desde segunda línea. Seis goles –cuatro en Liga y dos en Champions– serían su interesante bagaje goleador en su primer año en el Camp Nou, el del recordado triplete, en el que Busquets (3) –uno en Liga y dos en Champions– se consagró en el primer equipo y Hleb se estrelló procedente del Arsenal.

Tras tocar el cielo en Roma con su tercera Champions el Barça no reforzó la medular en el verano de 2009 debido al excelso estado de forma de algunos hombres como Xavi, IniestaTouré o el propio Busquets. La salida del marfileño rumbo a la Premier un año más tarde desembocaría en la llega de Mascherano. Un futbolista de un compromiso y rendimiento intachable pero con escasa pegada. Un factor acentuado todavía más tras su reconversión a central. Tampoco Afellay, incorporado en el mercado de invierno, acumularía demasiados tantos (2).

Habría que esperar al verano de 2011 para que la historia diese un vuelco con la llegada de Cesc Fàbregas y la confirmación de Thiago en el primer equipo. El de Arenys, favorecido por su adelantado rol de falso nueve, firmó quince tantos en su primer curso –nueve en Liga, tres en Copa, uno en Champions, uno en la Supercopa de Europa y otro en el Mundial de clubes– mientras que el mayor de los Alcántara firmó cuatro tantos: dos en Liga y dos en Copa. Unos registros que ni Song, ni los canteranos Sergi RobertoJonathan dos Santos o Rafinha han conseguido igualar en los últimos tiempos. Rakitic ha llegado para cambiar la historia y de momento lo está consiguiendo. El croata prácticamente iguala los números de Mendieta, Riquelme o Keita y en su primera campaña aún podría dar caza, incluso, a Deco (9). Como asistente, además, Rakitic también va un paso por delante de la mayoría de fichajes. El tiempo dirá si su peso en el juego y sus interesantes números se traducen también en títulos tras un primer curso que está aprobando con nota.