Primera derrota del Barça

El tercer amistoso de la pretemporada del Barça acabó convirtiéndose en la primera derrota del nuevo proyecto de Luis Enrique gracias a un tardío gol de Blemir Dzemaili, que disparó desde 30 metros y Claudio Bravo no consiguió atajar su balón.

El partido más importante de la pretemporada azulgrana, por la calidad de un rival como el Nápoles, comenzó con la intensidad propia de los encuentros veraniegos. Los de Luis Enrique no cuajaron su mejor actuación durante la primera mitad, pero el técnico asturiano continuó probando y ajustando los mecanismos del nuevo sistema táctico que quiere imponer en su nuevo Barça. En la portería, 'Lucho' hizo debutar al chileno Claudio Bravo, que disputó los 90 minutos y que, salvo el error en el gol, estuvo muy acertado en todas sus decisiones, incluyendo una clara intervención a un cabezazo intencionado de Marek Hamsik. 

Poco después llegarían las dos ocasiones más claras del Barça en el primer acto. Solo Rafael Cabral evitó que los de Luis Enrique se adelantase en el marcador. Dos providenciales salidas, evitaron que Munir pusiese por delante al Barça. En la primera se lió justo en el momento de definir tras un excelso movimiento sin balón de Ivan Rakitic y, en la segunda, solo ante la salida del guardameta del Nápoles, no supo definir con la izquierda tras una gran asistencia de Rafinha. Sin grandes momentos de gran fútbol, el partido se fue al descanso con empate sin goles en el marcador. 

PEDRO Y RAFINHA PUDIERON ADELANTAR AL BARÇA

El conjunto azulgrana salió con otra intensidad en la segunda mitad y se notó ya desde los primeros minutos. En los primeros compases, Pedro tuvo en sus botas, por partida doble, la oportunidad de adelantar al conjunto azulgrana pero sus disparos no encontraron, finalmente, portería. Un tiro lejano de Rafinha también avisó a los italianos del punto extra de intensidad de los culés que, cada vez más, comenzarona dominar la posesión y a jugar en campo contrario. 

En el minuto 60, Luis Enrique dio descanso a Alba, Piqué, Munir, Iniesta, Busquets y Rakitic para dar entrada a Grimaldo, Ié, Sandro, Sergi Roberto, Samper y Halilovic. El cambio de más de la mitad del equipo mantuvo la compostura del sistema durante la segunda mitad, pero no consiguió que el Barça mejorase de cara a puerta. 

En los italianos, Rafa Benítez también continuó experimentando y, además, concedió los primeros minutos de la pretemporada a Camilo Zúñiga, conocido por la afición culé, ya que fue el culpable de la lesión de Neymar durante el pasado Mundial de Brasil. A falta de 15 minutos para la finalización del partido, el asturiano sacó al terreno de juego de Deulofeu, Bagnack y Adama y solamente se quedaron sin jugar Ter Stegen y Masip.

TARDÍO GOL DE DZEMAILI TRAS UN ERROR DE BRAVO

Cuando todo parecía encaminado a que el partido acabase en tablas, un disparo lejano, a priori, sin peligro del suizo Blemir Dzemaili se le escapó de entre las manos a Claudio Bravo y el balón se acabó colando en la portería azulgrana dando la ventaja definitiva en el marcador a los italianos. 

A pesar de la reacción final en ataque de Deulofeu, el Barça no pudo igualar el marcador y se marchó de Ginebra con la primera derrota de la pretemporada bajo el brazo y con sensaciones confusas por lo visto durante los 90 minutos.