Neymar ya sabe lo que le espera

Neymar no salía de su asombro en el viaje de regreso a Barcelona. La sonrisa que había mostrado durante toda la jornada desapareció en los doce minutos que estuvo sobre el terreno de juego en el Arena de Gdansk. Nada más pisar el campo en sustitución de Alexis Sánchez empezó a recibir las 'caricias' de los defensores del Lechia. Una actitud incomprensible por tratarse de un amistoso y que puede ser la antesala del comportamiento que pueden tener muchos defensas tanto en la Liga como en la Champions durante la temporada.

Cuatro faltas en doce minutos sirvieron como carta de presentación en el fútbol europeo. Kacprzycki entró al campo prácticamente al mismo tiempo que él con la única misión de hacerse famoso como el primer futbolista que había cazado a la nueva estrella del Barça. Oualembo se sumó al fiesta y lo mandó contra la valla publicitaria de un empujón y Kostrzewa lo remató con un empujón sin el balón de por medio cuando buscaba un desmarque. El árbitro solo puso de su parte enseñando una tarjeta amarilla.

Neymar bastante hizo con no salir lesionado en su debut. Fue inteligente y no se revolvió ni provocó que los zagueros del Lechia se cebaran aún más con él. Tenía que solventar el trámite de forma sencilla, soltando rápidamente el balón sin complicarse la vida. Ya tendrá ocasión mañana en el trofeo Joan Gamper de mostrar un repertorio más amplio de sus habilidades.

El brasileño se marchó del campo tremendamente sorprendido y en el aeropuerto de Gdansk confesó que seguía sin entender los motivos que habían llevado a los polacos a buscarle los tobillos constantemente. Ni tan siquiera podían argumentar que había encendido sus ánimos con algún tipo de frivolidad. En los doce minutos únicamente pisó en una ocasión la pelota y rápidamente buscó una asistencia hacia Patric. Los defensas del Lechia no tenían excusa. Fueron a por él sin disimulo en un comportamiento muy feo y poco decoroso hacia el Barça que había convocado a Neymar como compensación por la cancelación del partido inicialmente debido a la recaída de Tito Vilanova.

La 'Joya' optó en Gdansk por contenerse, pero ha demostrado sobradamente que tiene carácter y no se arruga con facilidad. El mundo entero pudo verlo en el transcurso de la Copa Confederaciones. Uruguay intentó desquiciarle con todo tipo de artimañas y Neymar les plantó caro. Los charrúas no lograron su objetivo y se quedaron a las puertas de la final. Ante España, en el partido decisivo, ni tan siquiera dio opciones a Arbeloa para que pudiera emplearse con su dureza habitual.

Neymar es un futbolista que marca las diferencias con sus regates y el uno contra uno. Unas especialidades que también requieren de una correcta actuación arbitral para que tengan éxito. En este sentido, el Barça espera que los árbitros de la Liga española corten de raíz cualquier actitud antideportiva hacia el fichaje estrella para la presente temporada.

El delantero debe prepararse para todo tipo de campañas que se centren en su contra. Si en varias ocasiones ya han tratado de colgar a Messi la etiqueta de jugador antideportivo agarrándose a cualquier detalle solo perceptible por sus ojos, con Neymar puede ocurrir algo parecido. La peor consecuencia de todo ello sería que los árbitros de la Liga española, que en muchas ocasiones se han mostrado fácilmente influenciables, no respondan de forma firme ante el juego brusco que pueda sufrir el futbolista del Barça.

El jugador tendrá tiempo para rodarse en el Gamper ante el Santos y los dos amistoso siguientes a disputar durante la gira asiática. La primera prueba de fuego será en el debut liguero ante el Levante y en la final de la Supercopa de España frente al Atlético de Madrid. Será entonces cuando ya se aprecie si le espera una temporada dura.