FC BARCELONA - SUPERCOPA ESPAÑA 2015

Los cinco errores imperdonables del FC Barcelona en la ida de la Supercopa de España

El Barça tiene el sextete cuesta arriba por culpa de fallos en todas las líneas del campo

El Barça tiene que hacer un ejercicio de autocrítica

El Barça tiene que hacer un ejercicio de autocrítica / sport

esther blasco

Falló la defensa, falló el centro del campo y también lo hicieron los atacantes azulgranas. Incluso falló Luis Enrique desde el banquillo. Señalar, a toro pasado, es sencillo. Sin embargo, el Barça debe hacer un ejercicio profundo de autocrítica y entonar el 'mea culpa' para identificar los errores cometidos en el partido de ida de la<strong> Supercopa de España</strong> y tratar de reparar el daño en el partido de vuelta de este mismo lunes. 

El 4-0 encajado en San Mamés habla prácticamente por sí solo, pero ¿cuáles fueron los errores imperdonables del Barça en Bilbao? Se ha acusado directamente a la fragilidad de la defensa azulgrana, sin embargo, no es justo limitar los motivos de la debacle a los errores en la zaga. 

1. Demasiados cambios en el once inicial

1. Demasiados cambios en el once inicialLuis Enrique lo hizo pensando en la 'paliza' que supuso el partido de 120 minutos de la <strong>Supercopa de Europa</strong>, sin embargo, sus buenas intenciones no obtuvieron el resultado deseado. El técnico introdujo cinco cambios respecto al once de Tiflis, en busca de piernas frescas. Pero en lugar de futbolistas descansados se encontró con jugadores descoordinados.

Luis Enrique salió con las largas encendidas pensando en el partido de vuelta, mientras Valverde afrontó el partido de ida sin reservas.

De hecho, el asturiano fue el primero en asumir la responsabilidad del resultado de San Mamés: “Asumo la responsabilidad de la derrota. Entiendo que debía hacer rotaciones para proteger a mis jugadores". 

2. Falta de ritmo

2. Falta de ritmoEl Barça saltó a San Mamés con una marcha menos de la debida y se vio sorprendido por la intensidad y la presión del Athletic desde el primer minuto.

Sin llegar a caer en la relajación, al conjunto le faltó ritmo, algo lógico -por otro lado- a estas alturas de la temporada y más aún viniendo de un partido muy intenso y con prórroga en Tiflis, solo tres días antes de la ida de la Supercopa.

A pesar de las rotaciones, el equipo pagó el esfuerzo físico de la Supercopa y el desgaste que también supuso un viaje de casi 5 horas, llegando a Barcelona de madrugada. 

3. Una defensa demasiado frágil

3. Una defensa demasiado frágilLa defensa alineada en San Mamés se ha convertido en el foco de todas las críticas y es que, sin ser los únicos responsables de la derrota, cometieron algunos errores garrafales.

Empezando por el portero, Marc-André Ter Stegen, quien se confió en exceso en jugadas como la del primer gol, de San José desde el centro del campo. El alemán ha encajado ocho goles en dos partidos (la mitad de todos los que recibió el año pasado), unas cifras alarmantes para un guardameta que se mostró tan sólido la campaña pasada. 

Por su parte, los laterales se vieron desbordados contínuamente, mientras que la pareja Bartra-Vermaelen no estuvo a la altura y convirtió al Barça en un equipo vulnerable.  

4. Un centro del campo inédito

4. Un centro del campo inéditoSin duda, la mayor revolución del once de Luis Enrique afectó a la sala de máquinas, donde alineó a un centro del campo inédito. Javier Mascherano, haciendo de pivote defensivo, se mostró fiable desde el punto de vista defensivo pero con poca capacidad creativa

Los dos interiores, Rafinha y Sergi Roberto, tuvieron serias dificultades para conectar con la línea de ataque y se mostraron sin recursos para tirar pases a los tres hombres de arriba. 

5. Dificultad para crear peligro

5. Dificultad para crear peligroTan llamativos son los cuatro goles encajados por el Barcelona en Bilbao como que el conjunto azulgrana fuera incapaz de marcar un gol. Aunque, como es obvio, para marcar es necesario chutar entre los tres palos, y los disparos a puerta del Barça no abundaron precisamente en San Mamés.

Los de Luis Enrique no hicieron ni un solo chut entre los tres palos hasta el último minuto de la primera parte. El Barça volvió a sufrir un antiguo problema, la dificultad para generar ocasiones de peligro. En total, remataron ocho veces a la portería de Gorka Iraizoz. Messi fue autor de cinco disparos, mientras que Luis Suárez no chutó ni una sola vez.