Adrià Bernabé: El espectáculo está garantizado con su juego

Adrià Bernabé no puede faltar en esta selecta lista de jóvenes promesas de la cantera blaugrana. Es indudable que hace solo un par de meses ha cumplido 13 años, que a duras penas ha finiquitado su temporada en el infantil B y que todavía es muy temprano para empezar a marcarse objetivos dentro del fútbol profesional. Sin embargo, Bernabé despierta unanimidad entre todos aquellos que han tenido la oportunidad de disfrutar con su juego: es un chico diferente, con un fútbol que está lejos de lo que se puede esperar de un jugador de su edad. Adrià Bernabé es especial.

Procedente del Levante Las Planas, y tras una etapa de formación en la Damm y el Espanyol, el Barça apostó fuerte por este niño acostumbrado a coleccionar premios al mejor jugador en cuantos torneos participa de forma regular. Y el infantil B blaugrana no ha sido una excepción.

Arropado por una generación que se intuye histórica, Bernabé ha destacado por unas condiciones futbolísticas excepcionales. De entrada, es el clásico ‘10’, el de manual, el que está omnipresente en el centro del campo con capacidad para organizar el juego de ataque, llegar hasta la frontal del área rival con enorme facilidad y, si es de menester, culminar la jugada hasta el fondo de la portería.

Tiene recursos para todo. De esta joya resalta a primera vista su manejo de balón con la pierna izquierda. Zurdo nato, aunque trabaja a marchas forzadas el manejo con la pierna derecha para ampliar su repertorio de posibilidades, cuando el balón llega a sus pies, se intuye que algo pasará porque su juego siempre tiene un sentido, una idea precisa para castigar la defensa del rival del turno. Técnicos y compañeros no cesan de elogiar su enorme visión sobre el terreno de juego, su interpretación de los ritmos pese a su corta edad, virtudes que van asociadas a un líder. Y todo ello no exento de una garra y un trabajo defensivo que a veces se echa de menos en los clásicos zurdos peloteros con facilidad para desaparecer cuando aparecen las complicaciones. Este no es el caso.

Acostumbrado a coleccionar innumerables reconocimientos en los torneos que participa, las estadísticas de este infantil le acreditan como uno de los grandes goleadores del equipo, al tiempo que un asistente de lujo. Un equilibrio propio de un jugador capaz de asimilar la responsabilidad de asumir el peso del equipo.

Adrià Bernabé asimila bien los saltos en su corta carrera deportiva. De carácter humilde, hermano mayor en casa, ha apostado por tener a su lado como asesor al exjugador Iván de la Peña. Aires reposados para una de esas promesas que rompe moldes con solo 13 años y ya se siente seguido de cerca por todos aquellos que buscan algo diferente en el fútbol base.