Es sin duda la gran noticia del año en el mundo del atletismo. Después de ganar 10 de los 11 maratones que había disputado en su carrera (el único en el que no se había impuesto era en Berlín en 2013, donde fue segundo), el mejor maratoniano de la historia, el rey, el plusmarquista mundial de la distancia, Eliud Kipchoge, no ha podido vencer en este Maratón de Londres 2020 tan extraño, con un formato de circuito cerrado en el que los atletas han tenido que dar casi 20 vueltas para completar los 42,195km en el Saint James’s Park de la capital inglesa.
Malos síntomas
Al keniata ya a mediados de carrera se le ha visto con alguna mueca que dejaba entrever que algo no iba bien. El ritmo del primer maratón (62’54”) ha sido bastante ‘lento’ por lo que se podía prever, muy lejos del Récord del Mundo del atleta del NN Running Team en Berlín 2018. Tal y como han señalado Marc Roig y Carles Castillejo en la retransmisión de Teledeporte, Kipchoge no se ha avituallado durante casi 45 minutos, lo que hacía pensar que podía sufrir algún problema estomacal. Ha sido en el kilómetro 38 aproximadamente cuando Eliud se ha quedado atrás, ha mostrado signos de debilidad y Kitata, Kipchumba, Geremew y Lemma lo han aprovechado para escaparse y abrir brecha.
Histórico
Era una realidad. Kipchoge no iba a luchar por la victoria y se iba a producir un hecho histórico. El agujero ha sido cada vez más amplio y en cuatro-cinco kilómetros el grupo de cabeza le sacaba 27 segundos a un Kipchoge que ha querido terminar la carrera a pesar de que era evidente que su cuerpo no funcionaba bien. La victoria final ha sido para el etíope Shula Kitata en un final tremendo con el atleta de Adidas Vincent Kipchumba. Kitata ha parado el crono en 2.05.41.
