Kilian Jornet participó este domingo en un ‘trámite’ en la Ultra Eiger disputada en Grindelwald, Suiza. Y llama la atención ver la clasificación final. El mejor corredor de montaña de todos los tiempos terminó en la posición 46. Estamos acostumbrados a verlo ganar todo (o casi todo), pero esta vez tuvo un papel más que discreto. Algo que tiene una explicación.
El caso es que el catalán participó en la prueba de 16km porque era clasificatoria para la UTMB Mont Blanc, la prestigiosa carrera en los Alpes que ya ha ganado (la última vez, en 2022). Y para la que necesitaba terminar el recorrido. Ahora sí que ya de forma oficial estará en Chamonix, en su ‘jardín’, en la prueba de montaña más famosa y con más historia del mundo. Será el 1 de septiembre.
Unas molestias
“Me lo he tomado con tranquilidad. Hace dos días, después de unas magníficas semanas entrenando, sentí un gran dolor en mi glúteo derecho, así que no quería asumir ningún riesgo”, comentó Jornet a la llegada. Ese era el segundo motivo por el que no le vimos forzar la máquina. 1h48′ de carrera. “Corrí disfrutando del paisaje y charlando con mis compañeros corredores”, añadió el atleta afincado en Noruega.
THAT’S IT!
Kilian Jornet just got one Running Stone by finishing the @eigerultratrail by UTMB 🟨 E16.So, @kilianj, will you be in Chamonix on September, 1st? #UTMB2023e#UTMBWorldSeries #UTMBWorld#EUT2023 #Grindelwald#MeetYourExtraordinary pic.twitter.com/FDqN4ZCFlP
— UTMB® World Series (@UTMBWorldSeries) July 15, 2023
