Irán despejó las malas vibraciones tras el 6-2 encajado en la primera jornada y mantiene vivas sus aspiraciones de octavos de final tras superar a Gales en un añadido generoso y trepidante. No fue hasta el minuto 98 y jugando en superioridad numérica tras la expulsión de Hennessey cuando los pérsicos impusieron su pegada. Cheshmi, desde la frontal del área, provocó el delirio y Rezaeian retrató a Ward con una 'picadita' para firmar el 0-2 en el 111'. Gareth Bale celebró su récord de internacionalidades con amargura y con medio pie fuera del Mundial.

Irán amarga el récord de Gareth Bale (leer noticia)