La brecha abierta en el Gobierno de coalición continúa supurando. PSOE y Unidas Podemos llevan varios días enfrentados a cuenta de la derogación de la reforma laboral. No logran ponerse de acuerdo ni siquiera en qué están discutiendo. Los socialistas aseguran que se trata de un problema de "coordinación" en el seno del Ejecutivo. Los morados aseveran que el problema es más de fondo, sobre los contenidos del desmontaje de la ley del PP de 2012. En esta dinámica de roles, Yolanda Díaz evita entrar en el juego de sus socios y rechaza la oferta de ser ella quien lidere la derogación de la reforma laboral. No es suficiente para cerrar la crisis. El problema, recalca desde el pasado sábado, son los contenidos. Tanto es así que ha asegurado que su deseo es que sea Pedro Sánchez quien "lidere" este proceso. Eso sí, cumpliendo con el "compromiso" que ambos acordaron en diciembre de 2020 para desmontar la ley del PP de 2012.

Díaz exige a Sánchez que "lidere" el compromiso de derogar la reforma laboral que pactaron en diciembre (leer noticia)