Un derbi Real Madrid-Atlético siempre es mucho partido al margen de cómo lleguen de forma los dos. En este caso llegan bien, al alza tras sus últimos resultados lo que lo hace más interesante. Es una rivalidad encendida de dos aficiones que entienden su pasión de manera diferente y que no dejan de buscarse las cosquillas por nimio que sea la diferencia de filosofías.

Se busca plaza en las semifinales en el derbi de la necesidad (leer noticia)