Primera condición, no equivocarse con las salidas

Es bueno que recordemos cuál era la situación deportiva del Barça antes de que estallara esta crisis: una plantilla con grandes jugadores, pero con problemas físicos, sin ningún crack que saque presión a Messi, sin ni siquiera un suplente de Suárez, sin centrales de garantías en el banquillo y con ‘overbooking’ en el mediocampo. Así pues, cabe recordar que es urgente reforzar el equipo con un crack, un goleador y mínimo un central. El coronavirus no exime de hacer los deberes, aunque con las economías de los clubes muy tocadas, obliga ciertamente a cambiar de método, y veremos muchos trueques para abaratar las operaciones. Sin embargo, antes de poder acometer estos fichajes, es necesario que la secretaría  técnica defina bien las opciones de salida, y no equivoque las prioridades. Los casos de Rakitic y Umtiti explican el ‘impasse’ en el que se encuentra el club, que quiere venderlos pero se encuentra con que los futbolistas se enrocan: como ha explicado SPORT, el primero solo quiere ir al Sevilla (que no quiere pagar dinero) y el segundo no acepta de momento ser traspasado.

Otro ejemplo es el de Coutinho, pieza imprescindible para realizar un gran fichaje, pero que puede tener que quedarse al comprobar el poco interés que hay en el mercado. El bloqueo de estas ventas más evidentes tiene ahora mismo el efecto perverso de que se haya caído en la tentación de poner en el mercado futbolistas valiosos como Arthur, pieza básica para Setién, como volvió a recordar ayer mismo en otra entrevista. Esta vez, ha tenido que ser el propio jugador brasileño el que haya terminado con todas las especulaciones con un comunicado contundente que dejaba muy claro su compromiso con el Barça. Todos estos movimientos han servido para evidenciar que el club no puede equivocarse en las salidas: no debe vender lo que puede, sino lo que quiere. Para ello, deberá forzar la máquina y dejar claro a los futbolistas que no quiere que no cuenta con ellos si se quedan. La primera condición para abordar con éxito el mercado de fichajes es no equivocarse con las salidas.