Neymar no es un buen ejemplo

Decepción para Neymar al irse a casa en cuartos

Decepción para Neymar al irse a casa en cuartos / AFP

Toni Frieros

Toni Frieros

La hemeroteca, en este caso la videoteca, nos permitió descubrir la semana pasada unas imágenes impactantes por su contenido. Hablaba el entrenador del Corinthians brasileño en 2012 sobre un jovencísimo Neymar cuando este todavía defendía la camiseta del Santos: “Eso no se hace. Neymar no es un buen ejemplo para los niños”. Quien se quejaba amargamente por el comportamiento de Neymar sobre el césped era Tite, seis años después... ¡seleccionador de Brasil en el Mundial de Rusia! Un Mundial que ha destapado todas las miserias de Neymar como futbolista. Que es buenísimo, nadie lo puede poner en duda... de la misma forma que nadie puede negar que es egoista, cuentista, provocador y soberbio como jugador.

Las imágenes que se vieron en todo el mundo simulando penaltis, faltas y revolcándose por el césped como si le hubieran matado, le pasarán factura. Ya se la han pasado, porque Neymar está considerado un gran futbolista, pero también una pésima influencia para este deporte y los niños. Para él debe ser una enorme afrenta ver y saber que en algunas escuelas de fútbol, los chicos se tiran al suelo al grito de Neymar. Recoge lo que ha sembrado. Ni más ni menos. Una carrera, la suya, diseñada junto a su padre con la obsesión de ganar la mayor cantidad de dinero en el menor tiempo posible. Sin importarle las personas, ni las instituciones... ni sus compañeros de equipo. La traición al Barça no estuvo en que se fuera al PSG, si no en que le tomara el pelo a todo el mundo hasta el 1 de agosto para cobrar la prima de renovación. Hasta esos extremos llegó su egoísmo.

Después el PSG tiró la casa por la ventana por él y tarde o temprano le hará la vida imposible hasta que lo traspase al Madrid. Así es Neymar. Un gran jugador, sí, que ni ha podido ganar la Champions con el PSG, ni el Mundial con Brasil. Porque los títulos los ganan los equipos.