Días que marcarán el futuro

Neymar quiere salir sí o sí del PSG

Neymar quiere salir sí o sí / sport

Gerard López

Gerard López

Después de muchas semanas hablando del futuro de Neymar, de si acabará fichando o no por el Barça, entramos en la semana en la que se decide todo. Y no se trata solo de saber dónde jugará el brasileño la próxima temporada, sino también de las consecuencias derivadas de su hipotética llegada o de las que provocaría que acabe quedándose en París o firme por otro equipo.

Lo primero que hay que preguntarse es si deportivamente es necesario y de si se trata de una petición expresa del entrenador. Parece ser que no, porque el equipo ya se ha reforzado en ataque con Griezmann, un primer espada mundial. Además, por primera vez desde hace tiempo están apareciendo brotes verdes desde la cantera en la zona ofensiva. Carles Pérez, Abel Ruiz, a los que hice debutar en el Barça B, y Ansu Fati están llamando a las puertas del primer equipo y parece que Ernesto Valverde puede tener en este momento, por las razones que sea, más predisposición a dar oportunidades esta temporada a este tipo de futbolista.

También tienes a Rafinha, que está a un gran nivel. La llegada de Neymar, en ese sentido, condicionaría el crecimiento de estos jóvenes, sería un mensaje poco adecuado en este momento para ellos, porque sería un proceso inverso al que este verano se ha producido con la salida de jugadores que frenaban la proyección de estos canteranos. Malcom, André Gomes, Coutinho y Boateng se han desvinculado de una u otra manera de la primera plantilla del Barça y eso favorece la aparición del talento procedente de las categorías inferiores. Se trata de hacer un hueco a jugadores con potencial para, por lo menos, tener la oportunidad de demostrar si tienen sitio en el Camp Nou. Y, de momento, por lo que hemos visto, todo apunta a que es así. No tengo muy claro si el fichaje de Neymar ayudaría a potenciar esta dinámica en la que parece haber entrado la primera plantilla y el propio Valverde.

La clave está en lo que el Barça perdería con Neymar, es eso lo que debe preguntarse el club antes de realizar una operación tan importante. Porque de lo que no existen dudas es de que el brasileño es un futbolista indiscutible Siempre le he defendido. Es un auténtico fenómeno del que siempre he pensado que sería el heredero de Messi y Cristiano, pero un fichaje así no puede verse exclusivamente desde su aportación a nivel deportivo. Además, considero que en París no ha tenido la progresión que se intuía, que ha vivido dos años en clara regresión. Sin olvidar cómo se produjo en su momento su salida del Camp Nou.

El Barça se encuentra en este momento en una encrucijada y es difícil saber qué decisión es la correcta. Y quien debe tomarla es Bartomeu de forma unilateral. Ya no hay vicepresidente deportivo ni mánager general (Valverde no se pronuncia sobre el tema), así que el presidente es quien manda. La decisión es unilateral y su obsesión, como pasa con la sección de baloncesto, es ganar la Champions. Bartomeu está haciendo un ‘all in’, pero ¿a cualquier precio? ¿Hipotecando el futuro económico de la entidad? Si acaba fichando, todo dependerá de los resultados pero, dependiendo de la fórmula en que se concrete, el marrón podría comérselo otra junta directiva. Solo una negociación normal con el PSG podría ayudar a que todas las piezas encajaran, pero ¿cómo se puede negociar con un club del que intentaste sacar a Rabiot, Verratti, Thiago Silva y Marquinhos, y que te pagó hace dos años 222 millones por el jugador que ahora quieres firmar?

No se puede pretender que ahora el PSG le ponga un lacito a Neymar y acepte una operación ruinosa desde todos los puntos de vista para ellos: económica, deportiva y de imagen.