El Barça gana porque sabe a lo que juega

El Barça, hoy, puede ganar mucho más que una Liga: lo que está a punto de hacer, en realidad, es confirmar su brutal hegemonía en la competición que mejor mide la salud de un equipo y de un club. En LaLiga no cabe el azar: quien la gana es el mejor y punto. Y los números hablan solos: será la 8ª de las últimas 11, la 10ª de Messi, la 2ª de 2 de Valverde,  la 16a de las últimas 29 (tras la llegada de Cruyff). Son cifras que hablan de la inversión absoluta que se ha producido en el fútbol español, donde el Barça campa a sus anchas desde que, primero con Cruyff y sus discipulos, y más tarde con Messi, se ha quedado literalmente la Liga y la Copa en propiedad.

Puede que algún año las pierda, pero son simplemente excepciones a la regla. Y la norma no solo dice que las gana, sino que además lo hace ampliamente y además barriendo a su principal rival, el Real Madrid, a quien además le endosa rutinariamente goleadas en los clásicos. El club blanco ha maquillado con éxito esta realidad en los últimos años con su brutal y muy meritorio trío de victorias en la Champions, pero esta hazaña no puede esconder la indiscutible realidad: el Barça es sencillamente el mejor, porque tiene a Messi, porque tiene a grandes jugadores que lo acompañan, porque Valverde ha dado con la tecla adecuada y porque este es un club que sabe lo que quiere y a lo que juega. Mientras la mayoría de clubes no saben lo que les deparará el futuro ni cuál es su modelo, el club blaugrana, a pesar de los debates, sale al campo desde hace tres décadas sabiendo a qué juega. Y por eso gana. Y por eso seguirá ganando.