Mbappé reta a la mejor defensa del planeta

Alegría contra seriedad. Ésas serán las premisas en el duelo de esta tarde en Nizhni Novgorod  en el primer cuarto de final del Mundial de Rusia entre Francia y Uruguay a las 16.00 h (una hora más en la sede del partido).

Con el emergente Kylian Mbappé al frente, los galos maravillaron por su fútbol ofensivo ante la difunta Argentina de Messi... pero recibieron tres goles. Enfrente, Uruguay solo ha encajado un tanto en el Mundial (el del exmadridista Pepe) y construye su edificio a partir de esa solidez atrás.

A nivel individual, un nombre centra la atención en cada equipo. Didier Deschamps no podrá contar por sanción con el ‘bianconero’ Blaise Matuidi, un jugador clave en la medular al que podría suplir Corentin Tolisso.

Mientras, Edinson Cavani se entrenó ayer con balón pese a su edema en el gemelo izquierdo y las previsiones indican que el ariete del PSG, autor de dos golazos contra Portugal, depositará la responsabilidad de acompañar arriba a Luis Suárez en un jugador de la Liga: Cristhian Stuani (Girona) o Maxi Gómez (Celta).

“Uruguay lleva en sus genes esa intensidad y ese compromiso en la zaga”, recalcó ayer en la rueda de prensa el galo Deschamps. “Dependemos mucho de nuestra fortaleza defensiva y, a partir de  ahí, tenemos que seguir mejorando en otros aspectos”, coincidió su homólogo charrúa Óscar Washington Tabárez en una genial comparecencia.

Como muestra un botón...Francia lleva casi 500 minutos sin perforar la portería uruguaya, en concreto desde el 21 agosto de 1985 en la extinta Copa Artemio Franchi. Desde entonces han pasado 32 años, 10 meses y 14 días, en los que ambos equipos se han enfrentado cinco veces (cuatro empates a cero y un 1-0 para los charrúas con gol de Luis Suárez).

El azulgrana tendrá que reinventarse ante esa posible ausencia de su ‘media naranja’ Cavani y se verá las caras con su compañero azulgrana Samuel Umtiti, mientras que todo apunta a que Ousmane Dembélé empezará el partido en el banquillo.

El que tratará de rencontrarse es Antoine Griezmann, eclipsado por la electricidad de Mbappé. Por cierto, que el rojiblanco también tendrá enfrente a dos compañeros, Diego Godín y José María Giménez, los pilares de la mejor defensa del mundo.