Alonso, la última pieza del puzzle

Fernando Alonso es la única duda no resuelta en la parrilla 2018 después del aluvión de comunicados del viernes en Singapur. Confirmados los ‘divorcios’ de McLaren-Honda y Toro Rosso-Renault, los ‘matrimonios’ McLaren-Renault y Toro Rosso-Honda y el ‘flechazo’ de Carlos Sainz y Renault, el asturiano es, tal como definió su jefe en McLaren, Zak Brown, “la última pieza del puzzle”. Una pieza que, según todos los indicios, está a punto de encajar. 

El director deportivo de McLaren, Éric Boullier, ha negado que la renovación de Fernando Alonso se esté retrasando por discrepancias económicas o sobre la duración del contrato: "Estamos muy cerca de firmar con Alonso. Estamos de acuerdo en los grandes temas, falta cerrar los pequeños detalles del contrato, los puntos más importantes ya están acordados", ha comentado el francés a los micrófonos de Movistar+ F1.

Alonso quiere asegurarse un coche competitivo después de tres años de pesadilla con Honda. Por eso, tras hacerse oficial la ruptura con los japoneses, dijo que “antes de tomar una decisión sobre mi futuro, trataré de saber más de los planes de Renault”.

Boullier ha insistiro sobre este punto: “Vamos a tener a Fernando informado de qué paquete tenemos para el año que viene. Una vez que revisemos los datos para 2018, será más fácil cerrar las negociaciones”, ha subrayado.

En la misma línea se expresaba Zak Brown: “Estamos cerca de cerrar un acuerdo con Fernando. Él está muy contento con la dirección que está tomando el equipo. Tenemos un plan B por si acaso, pero estoy seguro de que vamos a llegar a un acuerdo”. 

Alonso pide “paciencia” a sus fans, pero sus palabras denotan ilusión ante el nuevo proyecto: “Es difícil hacerse una idea de si ganaríamos aquí, en Singapur, ya con motor Renault. Son cálculos imposibles sin datos en la mano...”, concedió el asturiano después de constatar las buenas prestaciones de los Red Bull de Verstappen y Ricciardo.