Fin de año con buen sabor de boca

Con un doblete de Cristhian Stuani y un tanto de cabeza de Juanpe, el Girona cierra el año firmando su cuarta victoria consecutiva en Montilivi

La entrada de Guillermo revolucionó el juego del Burgos e incluso consiguió el gol del honor para el Burgos

Stuani celebrando con sus compañeros

Stuani celebrando con sus compañeros / @GironaFC

Carles Rosell

No faltó su pizca de sufrimiento. 90 minutos dan para mucho, también para que el Girona se tambalee. Pero el tanto de Guillermo, en los primeros compases del segundo tiempo, y la consecuente reacción del Burgos, no fueron suficientes.

Girona-Burgos 17-12-2021

Liga SmartBank

3
1
Alineaciones
Girona
Juan Carlos; Arnau Martínez (Jordi Calavera, 87´), Juanpe, Bernardo, Santi Bueno, Valery (Jairo, 81´); Aleix García (Artero, 87´), Pol Lozano, Álex Baena (Ibrahima Kebe, 74´); Stuani, Samu Sáiz (Nahuel Bustos, 81´)
Burgos
Caro; Álvaro Rodríguez, Grego Sierra, Córdoba, Matos; Raúl Navarro, Andy, Elgezabal (Guillermo, 46´), Riki (Róber Alarcón, 87´); Ernesto (Claudio Medina, 70´), Pablo Valcarce.

Este equipo, el de Míchel, nada tiene que ver con el de las primeras jornadas. Gusta y se gusta. Es solvente, contundente. Ya enlaza cuatro victorias en Montilivi. La última, anoche ante más de 4.000 espectadores. Cierra el año y la primera vuelta con 31 puntos, uno más que el último curso. Y además, se eleva hasta puestos de playoff, esperando a ver qué es lo que pasa esta jornada.

Primer tiempo excelente. Sin apenas fisuras. Algún aviso del Burgos, pero aislado. En la otra portería, pudieron caer unos cuantos. Fueron dos. El primero, con un testarazo de Juanpe, que colocó el balón lejos del alcance de Caro.

El segundo, de Stuani, receptor de una asistencia de libro de Baena. Y no fueron más porque Caro apareció un par de veces y porque el larguero evitó el tanto de Samu.

La entrada de Guillermo revolucionó el partido. Marcó el 2-1 y la balanza se equilibró. Hasta que Stuani quiso. El uruguayo está de dulce. Cuando más le necesitaba su equipo, firmó la sentencia a un cuarto de hora del final. Esta vez el regalo vino de los pies de Arnau. Pudo caer el cuarto, pero Caro, por partida doble, rechazó el testarazo del uruguayo y el posterior remate, con todo a favor, de un Bustos que no estuvo acertado.