Adrià Altimira, forjado en la Masia

Adrià Altimira, en un partido con el Juvenil B

Adrià Altimira, en un partido con el Juvenil B / sport

Albert Rogé

Albert Rogé

El único jugador del primer prebenjamín del Barça que se ha formado íntegramente en el club y actualmente está en el Juvenil B. Buena presentación para empezar a conocer a Adrià Altimira, el lateral derecho que luce el brazalete del Juvenil B del Fútbol Club Barcelona. Y es que con él sí que puede decir esa frase de “lleva toda la vida en el Barça”. Pues así es. Con cinco años empezó jugando en el Granollers y durante el segundo año hacia las pruebas con el Benjamín B del Barça, que eran dos años mayores que él. En ese equipo estaban jugadores del Barça B como Oriol Busquets, Guillem Jaime y MinguezaAdrià tenía muchas cualidades y por ello fue uno de los ocho elegidos para representar al primer Prebenjamín de la historia del Barça. Hasta ese momento, el primer equipo de formación era el Benjamín B. Además, tiene el privilegio de decir que el primer gol de la historia de su equipo fue suyo. 

De esos ocho jugadores, también estaban sus actuales compañeros Guillermo Amor y Mika Mármol, pero ellos tuvieron que dejar el Barça, el primero para acompañar a su padre a Australia y el segundo al terminar la etapa de benjamín.

Que el equipo dónde te has formado sea el FC Barcelona es la mayor suerte para cualquier futbolista que quiere triunfar en el mundo profesional. La Masia es la mejor escuela y allí Adrià ha crecido como futbolista pero también como persona. Nacido en Cardedeu, ha ido potenciando sus virtudes y mejorando sus defectos con el paso de los años. En el vestuario siempre ha sido uno de los referentes y este año luce el brazalete en el Juvenil B. Su enorme velocidad le hace ser un lateral derecho muy peligroso cuando se incorpora al ataque, que era su hábitat hasta hace poco. Adrià siempre había jugado de delantero centro o de extremo. Sin embargo, en los últimos años lo han probado de lateral o incluso de interior y su rendimiento ha sido excelente. Un multiusos. Además, es súper competitivo y eso se le nota en el campo, dónde nunca regala nada. Su calidad con los pies, obvia para permanecer toda la vida en la Masia, le ha permitido subir en varias ocasiones al Juvenil A de Denis Silva. De esta manera, se ha convertido en el primero en hacer todo el camino, del Prebenjamín al Juvenil A.

En su formación futbolística hay varias personas que han tenido un peso importante. Desde entrenadores como Cristian Catena, que lo tuvo en Prebenjamín y Cadete B, Marc Serra, Benjamín A y Alevín A, o Franc Artiga, Cadete A y actualmente en el Juvenil B. De ellos es de los que se ha contagiado más del ADN Barça. En el ámbito de compañeros mantiene una relación casi de hermanos con Adrià Bernabé, con el que se enfrentó en los derbis Barça-Espanyol de pequeño, compartió vestuario en el Barça y ahora mantiene el contacto tras su marcha al Manchester City. Eso sí, a los que se lo debe todo es a su padre Jaume y a su hermano Jordi. Ellos siempre han estado allí apoyándole y han sido el motor para seguir soñando con ser futbolista profesional.