¿Por qué las bolas anales habrían influido en la derrota de Magnus Carlsen?

Magnus Carlsen es uno de los mejores jugadores de ajedrez de la historia, habiendo sido campeón del mundo hasta en cinco ocasiones. Por eso sorprendió su derrota en el último torneo que disputó. Ahora bien, lo más llamativo fue lo que ocurrió después: acusó a uno de sus rivales de haber hecho trampas durante una partida.

Alireza Firouzja, francés muy reconocido en esta disciplina, fue el ganador de la Sinquefield Cup en Estados Unidos, pero las cámaras se centraron en un tuit de Carlsen: "me retiro del torneo. Siempre he disfrutado jugando en el club de San Luis y espero regresar".

¿Qué ocurrió? ¿Por qué perdió en la tercera ronda frente al estadounidense Hans Niemann, de 19 años, y situado en el puesto número 43 del ranking mundial?

La realidad supera a la ficción, y tras este mensaje de Carlsen, algunos sospechan de las bolas chinas anales como las culpables de que el campeón del mundo no lograse la victoria.

Así, como lo lees. Las redes sociales han mostrado de nuevo su sentido del humor, aunque muchos de los usuarios que han acusado de este sucio método a Niemann lo digan muy en serio.

Según La Razón la mecánica de la trampa sería simple: un cómplice que estuviera viendo en vivo el partido (como efectivamente se estaba transmitiendo), podría simular el juego real en una computadora y ver los movimientos de esta.

Posteriormente, a través de las vibraciones, podría “avisar” al supuesto tramposo cuáles serían los movimientos sugeridos. Las bolas anales fácilmente pasarían cualquier control de seguridad.

"Sé que soy limpio, si quieren que me desvista completamente lo haré, me da igual", señaló Niemann en una entrevista posterior a la partida en la televisión del club de ajedrez Saint-Louis, que organiza el torneo.