Primer 'matchball' para Alcaraz en Turín

Carlos Alcaraz aseguró estar mentalmente agotado tras caer en su debut en las ATP Finals ante Alexander Zverev. Pese a empezar con mejor ritmo del que venía mostrando hasta la cita, el murciano no supo aprovechar sus oportunidades y se enredó entre sus propias dudas para acabar cediendo la ventaja ante el tenista alemán.

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Una derrota que le deja sin margen de error si quiere estar en las semifinales y que le obliga a vencer a Rublev y Medvedev en los partidos restantes de la Round Robin. Partidos que se presentan igual o incluso de más nivel que el disputado Zverev y que deben sacar una versión más parecida a la que mostró en los últimos compases del partido, cuando mejoró ostensiblemente y se le vio con más soltura.

Enfrente, un Rublev que parte con la misma situación tras haber caído ante su compatriota Medvedev en la primera jornada, aunque mostrando unas sensaciones muy distintas. Andrey mostró un nivel altísimo, pero topó ante la mejor versión de un Medvedev que apunta alto en la cita y que en absoluto hizo justicia al abultado 6-4 y 6-2 que reflejó el marcador final.

Ante el ruso, Alcaraz se topará con un partido muy distinto al que tuvo que plantear ante Zverev. Rublev se mueve a las mil maravillas en este tipo de pistas y es capaz de imponer un ritmo frenético que a buen seguro obligará a Carlitos a no poder desconectar un solo segundo. Unas desconexiones al servicio que le costaron la derrota en el primer partido y que achacó al desgaste mental al que ha llegado a este tramo final de temporada.

"Es mucho cansancio mental de estar a una exigencia alta mucho tiempo. Tengo claro lo que me está pasando y, a partir de ahí, toca trabajar para mejorarlo" aseguró tras el partido ante Zverev. Un desgaste que deberá resetear por completo si quiere vencer a un Rublev que apunta a "un partido a muerte".

Una 'final' sin precedentes

Turín vivirá el primer enfrentamiento oficial entre Alcaraz y Rublev, aunque se vieron las caras hace apenas un año en un partido de exhibición en los Emiratos Árabes, que bien hará el murciano en borrar de su memoria. En menos de una hora, el ruso barrió por 6-2 y 6-1 dando buena prueba de lo que es capaz en su máximo esplendor.

No vive lejos el ruso de ese nivel tras la actuación sublime en París-Bercy, donde solo la inigualable capacidad de superación y resistencia de Djokovic pudieron apartarle de la final. En el debut, fue la mejor versión de Medvedev quién le privó de un mejor resultado.

Conocedor de ello, Alcaraz sabe que de querer seguir con vida en sus primeras Finales ATP, tendrá que seguir mejorando su nivel. De lo contrario, puede suponer un amargo y prematuro adiós que oscurecería un poco más este final de año.

De lo contrario, Alcaraz puede tener en Rublev la mejor de las oportunidades para dar inicio al último gran golpe en el año de su consagración. El Pala Alpitour de Turín, listo para vivir la primera gran final entre los ocho maestros del año.