Jordi Moix: "No tenemos nada que esconder"

El ex vicepresidente económico del Barça analiza la situación económica del club para SPORT

Moix no teme que el próximo presidente actúe contra su junta y cree que el club tiene activos para salir de la crisis

Jordi Moix, ex vicepresidente económico del Barça

Jordi Moix, ex vicepresidente económico del Barça

Ivan San Antonio

Ivan San Antonio

Jordi Moix, vicepresidente económico y patrimonial en la junta de Josep Maria Bartomeu, atendió desde Madrid la llamada de SPORT para valorar la polémica surgida en el entorno blaugrana tras conocerse las cifras publicadas por el Barça a través de la memoria económica del club.

¿El Barça está en la quiebra o cerca de ella?

El titular que dice que la deuda es de 1.200 millones entiendo que es muy llamativo, pero esto no funciona así. La deuda neta es lo que debes menos lo que te deben y ese es el termómetro que sirve para comparar. La del Barça está en 488 millones.

Teniendo en cuenta cómo han bajado los ingresos, sigue siendo una cifra importante. Además, la deuda a corto plazo es de 730 millones de euros.

Es verdad que la deuda a corto plazo se ha incrementado y se tiene que gestionar, hay que plantearlo con los bancos, explicando las cosas cómo están en función de cómo está la pandemia, el por qué este incremento. Mientras había pandemia, íbamos renovando pólizas y no había problema. No quiero decir que no haya ningún problema porque, mientras no vaya gente al estadio y no haya turismo, esto impactará en nuestro club.

¿Qué porcentaje de culpa tiene el Covid y cuál es de la gestión de anterior junta en esta crisis?

Teníamos una cuenta de explotación apretada. Había renovaciones de jugadores más emblemáticos y más consolidados, incluido el número uno del mundo. Y lo mirábamos de cuadrar. Me comprometo con estos contratos, pero tengo que generar ingresos para poder asumirlo todo. Estábamos apretados, sí.

¿Eso no es adecuar los ingresos a los gastos o, como decimos en Catalunya, ‘estirar més el braç que la màniga’?

La decisión la tomas en paralelo, en función de las negociaciones que tienes con los jugadores. Lo haces dentro de un paraguas o un horizonte de previsión de ingresos. En función de eso, haces la adecuación. El equilibrio entre gastos e ingresos no es una decisión separada.

¿No es demasiado atrevido pensar en un 25% de aforo en el Camp Nou en febrero y un 50% en mayo?

No hicimos unos números pensando que el Camp Nou estaría cerrado. Además, la pandemia nos ha cogido con contratos de jugadores a los que les quedan dos o tres años, de acuerdo con los ingresos que teníamos antes, no los de ahora. Esto al Getafe le supone un 10% de desfase, a nosotros nos afecta un 30%.

¿Prever una venta de jugadores por valor de 120 millones no era ya un ejercicio de optimismo contable para mantener el superávit?

Los últimos tres años habíamos estado vendiendo por una media de 80 millones por año. Un año fue Neymar, pero otros… Sin el Covid, la previsión era de otros precios. No era tan descabellado pensar que vendiendo a un Rafinha, un Todibo o un Aleñá no llegaríamos. Se había hecho otros años. Cuando llegué me lo planteó la secretaría técnica y no lo vi descabellado.

¿Teme una acción de responsabilidad?

La verdad, no he pensado mucho en ello, pero no tenemos nada que esconder. Si quien gane quiere iniciarlo, nos explicaremos con ‘ets i uts’. Hemos generado sin el Covid unos 200 millones de beneficios acumulados. Este año hemos perdido 97. El Real Decreto del Gobierno exime a los cuatro clubs que no son SAD de responsabilidad mientras no se pueda abrir el estadio. Y las cuentas auditadas no tienen salvades, cosa que no pasó hace diez años. No sería agradable. Sí, hemos fichado jugadores que algunos no han funcionado, pero otros sí.

¿Habrá que vender jugadores, descapitalizarse deportivamente, para salir de la crisis?

No necesariamente. Te pongo en contexto. La hoja de ruta debe ser renegociar calendarios con los acreedores bancarios, que están por la labor. Pero hay que presentar un ‘business plan’. Tus patrocionadores principales siguen, en principio, funcionando, aunque también están sufriendo. Y la operación del Espai Barça te aligera una quinta parte de la deuda neta, unos 100 millones.

¡Salvados!

Podemos licitar las obras ya y a mejor precio ahora. Si el Covid se alarga, tienes la ventaja de que puedes hacerlas más rápido y cada año ahorrar unos 25 o 30 millones del coste. Y tienes un proyecto que puede atraer nuevos patrocionadores tecnológicos vinculados a la obra. Esta hoja de ruta te aligera a corto plazo.

Todo esto no se hace en dos meses.

Pero es que el ayuntamiento está esperando a que vayamos a firmar. Y las obras pueden empezar a la que entre la nueva junta directiva: si hay voluntad, se organiza la Asamblea, se aprueba el financiamiento y empiezan las obras. Y es pasar la deuda a corto plazo a largo plazo. El Ayuntamiento está esperando a que vayamos a recoger la licencia. Y luego está el Barça Corporate.

Cuente.

Llevamos mucho tiempo trabajando con ello y ahora no queremos venderlo porque no queremos que nadie controle Barça Studios, pero sí podemos buscar un acompañante. Esta industria está mucho menos afectada y podemos encontrar a alguien que nos pague una parte del proyecto por el valor que ya tiene ahora, sin haber arrancado. Y otra parte puede hacer inversiones para poder crecer a cambio de un porcentaje de los beneficios.

¿De cuánto dinero estamos hablando?

Permíteme que no te diga la cifra porque si luego es otra… Además, pedimos confidencialidad en las negociaciones, pero son cantidades bestiales. Por cuatro duros no se puede hacer esto.

¿Oiga, me aclara lo de Goldman Sachs? Dijo que el crédito de 90 millones no tenía garantías, pero en cambio, sí las tiene, a través de los beneficios de las tiendas. ¿Es así?.

¿Los ingresos de las tiendas deberían ir a Goldman Sachs en caso de impago? No. La garantía es el propio club, el club como Futbol Club Barcelona.

¿Cómo? ¿Eso no sería mandar en el club por la puerta de atrás?

Cuando haces un préstamo o das unan garantía directa de alguno de los activos del club se trata de que, si no pagas la hipoteca, me quedo la finca. Si no es garantía directa, el creditor puede ir en tu contra si no pagas, reclamar a la sociedad que te pague en caso de que no lo haga.

Insisto, parece una vía de control del club.

En el caso extremo de que el club no llegara a pagar, entonces igual sí podrían tener un consultar dentro. Pero eso pasa siempre. Zara pide dinero a los bancos y los bancos hacen un ‘reporting’ de la empresa. Me parece mucho más peligroso los de los bonus que propone un candidato.

¿La emisión de bonus de Joan Laporta?

Para colocar bonus entre mucha gente a través de la CMV, si los quieres colocar con un interés un poco de mercado, tal y como está el deporte hoy, te pedirán garantías. Y si das garantías directas, aquellos acreedores que no tienen acceso directo, también lo pedirán.