El Inter pasa con un suficiente la prueba del Hellas

Pasó con aprobado raspado el Inter la prueba que planteó un combativo Hellas Verona. Los de Simone Inzaghi vencieron con un solitario tanto de Lautaro Martínez, al inicio del encuentro, y empataron a puntos con la Juventus, que perdió, y se colocó a uno del Milan, que también pinchó.

Inter-Verona

INT

1

0

HEL

Alineaciones

Inter
Onana; Skriniar, Acerbi, Bastoni, Darmian, Gagliardini, Calhanoglu (Asllani, 69'), Mkhitaryan (Barella, 77'), Dimarco (Gosens, 77'), Lautaro (Carboni, 89'), Dzeko (Correa, 69').

Hellas Verona
Montipo; Dawidowicz (Magnani, 66'), Hien, Ceccherini, Depaoli, Ilic (Lasagna, 66'), Tameze (Veloso, 66'), Doig (Piccoli, 80'), Kallon (Sulemana, 57'), Lazovic, Djuric.

Goles

1-0 M. 3 Lautaro.

Árbitro

M. Fabbri. T.A: Dawidowicz (49'), Djuric (53'), Sulemana (90').

Estadio

Giuseppe Meazza.

De hecho, lo mejor del encuentro llegó a los tres minutos de partido. Lautaro Martínez aprovechó un rechace dentro del área para disparar con zurda, lejos del alcance de Montipo, e inaugurar el marcador.

Parecía que el encuentro resultaría fácil para los 'neroazzurri', pese a las rotaciones, pero el Hellas empezó a combatir con ahínco, bien replegado en su campo y sin conceder prácticamente ocasiones. Únicamente Mkhitaryan puso en apuros a la zaga visitante, pero su disparo se perdió por la derecha de la meta de Montipo.

En la segunda mitad, no varió el decorado. El Inter siguió pensando más en la Supercopa de la próxima semana ante el Milan, mientras que el Hellas Verona solo podía resistir, hecho que logró durante los 90 minutos, pero le costaba mucho desplegarse y generar peligro.

Todo pudo quedar visto para sentencia en el minuto 63, pero el árbitro invalidó un tanto de Lautaro por una falta sobre el defensor. La réplica la puso rápido Sulemana, pero su potente golpeo lo sacó con acierto Onana, en la mejor oportunidad de los visitantes en todo el encuentro.

En los últimos minutos, ya con titulares como Gosens o Barella sobre el verde, el Hellas acabó por encerrar a los locales, más por el fruto del ímpetu y lo corto del resultado que por fútbol, pero se quedó sin el premio del empate ante un gris Inter.