Belotti hunde, un poco más, al Milan

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Belotti celebrando el primer tanto del partido. / EFE

sport.es

Tras la debacle en San Siro ante el Inter en el 'Derby della Madonnina' el Milan necesitaba un triunfo revitalizante para despertar de nuevo y reengancharse a la parte alta de la tabla. Lo hicieron durante 45 minutos pero se olvidaron de defenderlo en la segunda donde Belotti los destrozó. Un doblete de los que tocan la moral y el Milan no va muy sobrado de ello.

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Serie A

2
1
Alineaciones
Torino
Sirigu, Izzo, Lyanco (Ansaldi 57'), Bremer; De Silvestri, Baselli, Rincón, Aina (Djidji 83'); Verdi (Berenguer 66'), Belotti, Zaza.
Milan
Donnarumma; Theo Hernández, Romagnoli, Mussachio, Calabria; Bennacer (Rebic 78'), Çalahanoglu, Kessié, Suso, Leao (Bonaventura 65'), Pitaek.

No hizo una mala primera mitad el Milan que salió al terreno de juego conscientes que necesitaban dar un golpe de efecto en un campo siempre difícil. Más en estos últimos años donde el Torino ha obtenido buenos resultados y se ha peleado con los mejores.

Çalhanoglu de libre directo pudo inaugurar el marcador pero el encargado de hacerlo fue finalmente el de siempre. Piatek tomó la responsabilidad del penalti provocado por Leao en el minuto 18 de la primera mitad para adelantar a los 'rossoneri' en el marcador. Fueron los mejores minutos de los de Giampaolo. No los supieron aprovechar.

El ritmo del partido bajó y eso favoreció los intereses de los locales a los que no les convenía el desgaste físico. Llegar vivos al tramo final de partido les servía. Vaya si les sirvió.

La segunda parte del Milan se pareció al choque contra el Inter. Parecía que el 0-1 ya les iba bien y no tenían miedo a las oportunidades del Torino. La gasolina se acabó entre los milanistas y lo pagaron. Se dejaron remontar un partido que pudieron cerrar en la primera mitad.

El gallo Belotti se vistió de héroe para dar un golpe de efecto al inicio de temporada de los de Turín. Un doblete esperanzador para recuperar el olfato y devolver a los suyos a la senda del triunfo. El Milan mientras tanto se hunde y cada temporada que pasa parece más normal. Triste.