Le Mans tendrá su Art-Car

En 1975 el francés Herve Poulain decidió tomar parte en las 24 Horas de Le Mans con un coche llamativo, diferente. Poulain, gentleman driver pero sobre todo marchante de arte y especialista en subastas, tanto de arte como de automóviles clásicos, pidió a Alexander Calder, uno de los más célebres escultores del momento, que le decorara su BMW 3.0 CSL con el que iba a afrontar la prueba francesa.

Calder no pudo negarse. No sólo era escultor -y también pintor- sino que destacaba por sus esculturas móviles. Llevaba arte en los genes, hijo y nieto de escultores y su madre era pintora. Pero además él sentía cierta pasión por la mecánica, no en vano curso estudios de ingenirio mecánico, lo que le posiblemente le facilitó el diseño de sus esculturas móviles.

Desde 1975 hasta ahora han pasado muchos años, 42. Pero los Art Car siguen vigentes, aunque sea como una rareza. BMW lleva ya 17 en su haber -entre ellos uno decorado por el español César Manrique- aunque no todos han llegado a competir. 

'HUMAN'

En la presente edición de las 24 Horas de Le Mans será un equipo francés, Labre Competition, quien alineará un ‘art car’. Una obra de arte sobre la base de un Chevrolet Corvette GTE realizada por Ramzi Adek. Una forma de celebrar la 24ª participación consecutiva del equipo en Le Mans.

Adek, nacido en Aix en Provence (Francia) en 1976, se inició como grafitero en París y muy pronto evolucionó por su inspiración pop-art, destacando por sus colores subidos y sus efectos luminiscentes.

El artista se ha inspirado en los comics más vanguardias y rompedores, destacando el rostro femenino de la aleta derecha o palabras tales como ‘¡Boom!’ y ‘crash’, habituales en los comics, así como un antebrazo que recuerda a la fuerza de los superhéroes. Porque Ramzi Adek trata a los tres pilotos como ‘superhéroes’ pero a la vez quiere dejar claro que los superhéroes son humanos, de forma que ha bautizado a su trabajo como ‘Human’.

Un trabajo curioso, entronque de luminiscencia discotequera y comic más vanguardista, aunque el efecto luminoso del coche quedará reservado para el momento en que reposte por la noche. Será entonces, con el motor y los faros apagados, cuando el efecto fosforescente de la pintura adquirirá toda su brillantez y esplendor.

El Corvette del equipo Labre es idéntico a los oficiales -uno de éstos irá pilotado por el español Antonio García- con motor delantero central V8 de 5.5 litros y 500 CV, para 1.245 kg. de peso.