Eres ciclista o runner empedernido y tienes la duda de si tu disciplina es compatible con la otra. ¿Es bueno ir en bici y correr? ¿Se puede salir a correr siendo ciclista? Sí, tranquilo, a continuación, vamos a repasar estas y otras dudas que afectan, tanto al mundo del ciclismo como al del running.
Soy ciclista, ¿es bueno correr a pie?
Muchísimos son los ciclistas que se preguntan si el running es bueno para su deporte. Durante tiempo, corrió la teoría de que era totalmente incompatible e incluso perjudicial, pero con el paso de los años, la mejor formación de los preparadores físicos y el avance de la ciencia, se ha demostrado que el ciclismo y el running son compatibles y que, con moderación, pueden resultar beneficiosos para cualquier tipo de ciclista, incluso los más profesionales. Como veremos más adelante, incluso los ciclistas profesionales son practicantes de la carrera a pie durante casi todo el año. El caso más evidente es el de Wout Van Aert.
La carrera a pie en el ciclismo
Dentro de lo que sería la carrera a pie, podemos encontrar infinitas modalidades de running. Por este motivo, expresar una afirmación cierta y única, es totalmente imposible. No será ni tendrá el mismo impacto correr cinco quilómetros a cinco minutos el quilómetro que hacer una media maratón a cuatro minutos pelados o hacer una ultratrail de montaña. Así pues, sería absurdo hablar de una afirmación como “el running es perjudicial para el ciclismo” o “el running es bueno para el ciclismo”.
Esto no va de buenos y de malos, esto va de salud y rendimiento. En este sentido, durante años el running moderado en intensidad y duración se utilizaba solo en pretemporada. Evidentemente, sigue siendo muy útil para esta fase del calendario, pero cada vez se incluye más en las pautas de entrenamiento durante el periodo competitivo. En los stravas de gente tan popular como Wout Van Aaert, Tom Pidcock o Luke Durbridge se puede apreciar claramente como corren a un ritmo más que interesante. Por no hablar ya de las machacadas que se han pegado fuera de temporada Adam Yates o Freddy Ovett que han bajado de las tres horas en maratón.
Running para el ciclista aficionado
Para el ciclista aficionado o cicloturista, la cosa puede ser bastante distinta. Es ambos casos, no se acostumbra a disponer de todo el tiempo del que nos gustaría, así que, muchas veces, el running es una interesante alternativa. Se requiere de menos tiempo, es otra excelente opción para perder peso, y encima, ayuda a reforzar la musculatura y toda la masa ósea.
En cuarenta y cinco minutos, te puedes pegar una sesión muy intensa y exigente, además de que puedes aprovechar para compaginarla con algo de ejercicios de gimnasio, core o propiocepción, que te ayudaran a mejorar el rendimiento y tu estabilidad encima de la bicicleta. Es válido tanto mara MTB como para carretera.
En los meses de invierno, mucha gente sale del trabajo cuando ya ha anochecido. Por este motivo, el running es interesante para compaginar con sesiones de rodillo. Combinando las dos cosas, puedes ponerte muy en forma y bastante más de lo que crees.
Si nunca te has dedicado al running es normal que tu musculatura necesite de un poco de tiempo para adaptarse. Las agujetas los primeros días son inevitables, pero debes hacer una adaptación muscular progresiva. No te pongas a correr quince quilómetros el primer día, porque, aunque puedas cardiovascularmente soportar el esfuerzo, es probable que muscularmente lo acuses.
Natación, ciclismo y correr
Si el running y el ciclismo fueran disciplinas tan incompatibles como alguno dicen, los mejores triatletas del mundo no serían capaces de pedalear a esa velocidad ni de correr a esos ritmos estratosféricos. El triatlón es un deporte muy duro y la transición de la bicicleta al running, una de las cosas más complicadas que existen. Después de hacer unos quilómetros de bici a tope, ponerse a correr acostumbra a ser muy doloroso. Tenemos casos como los de Cameron Wurf, que compagina el triatlón de larga distancia con el ciclismo profesional.
Ivan Raña en un su día, también probó suerte con el xacobeo Galicia. Andrew Talansky, todo un ganador de Dauphiné, también dejó el ciclismo de alta competición para dedicarse al triatlón. Muy parecido a la situación del popular y curioso australiano Adam Hansen.
Conclusión
La carrera a pie y el ciclismo no son, para nada, disciplinas incompatibles. Sin embargo, hay que guardar cierta prudencia a la hora de compaginarlas. El running es mucho más lesivo, pero también nos ayuda a trabajar partes del cuerpo que habitualmente no trabajamos. Lo importante, es hacerlo progresivo y no empezar por todo lo alto.
En definitiva, mi opinión es clara: a menos que te dediques profesionalmente o semiprofesionalmente al running o al ciclismo, puedes hacer lo que te plazca. Al fin y al cabo, lo importante es hacer deporte salud, y no obsesionarse con ninguna de las disciplinas. ¡Pedalea, corre, nada, salta, baila, canta… Disfruta!
