Su último partido de Liga y en casa fue el 6 de enero del 2013

Iker Casillas, un año en el infierno

Muchos ven una mano negra detrás de la suplencia de Iker Casillas, pero Diego López disipa las dudas con su gran rendimiento

Iker Casillas cayó en desgracia el día que Florentino Pérez decidió fichar a José Mourinho. Fue el preludio a una pesadilla que empieza a cumplir aniversarios negativos después de una trayectoria repleta de éxitos. El primero llegará el día de Reyes en el que cumplirá un año sin jugar un partido de Liga el Santiago Bernabéu. Doce meses en el banquillo por primera vez desde que debutara con el Real Madrid el 12 de septiembre de 1999. Un año en el infierno de la suplencia liguera ante su público que tendrá continuidad en los partidos lejos de casa el próximo 20 de enero.

Casillas jugó su último encuentro de Liga en el Bernabéu hace un año ante la Real Sociedad (4-3), pero la fecha pudo ser el 16 de diciembre ante el Espanyol (2-2) si Adán no hubiese sido expulsado justamente aquel 6 de enero ante el equipo donostiarra a los ocho minutos de partido por un claro penalti sobre Vela. Aquel día de Reyes del 2013 Mourinho había ‘regalado’ una nueva suplencia a su capitán, pero acabó jugando por fuerza mayor para sustituir a su compañero y jugar los restantes 82 minutos por última vez como portero del Madrid en la Liga.

Una vuelta sin Casillas

Un año después de jugar frente a la Real Sociedad, el Madrid ha disputado 17 partidos en el Bernabéu con Diego López bajo los palos, que serán 18 ante el Celta el próximo lunes si no ocurre nada extraño. Con el portero gallego el equipo madridista ha ganado todos los partidos salvo uno, con 66 goles a favor y 21 en contra ante los 13 rivales que han visitado el coliseo blanco, cinco repitieron.

Casillas cayó en desgracia por hacer frente a Mourinho. Hasta aquí todos conocen la historia de la tortuosa relación entre el jugador y el entrenador, que tuvo su momento más complicado cuando se supo que Iker había llamado a Xavi para calmar los ánimos después del clásico de la Supercopa que acabó de mala manera.

Pero muchos apuntan a que la situación de Casillas se debe a la figura de Florentino, al que señalan como propulsor de la situación. De hecho, quienes propugnan dicha teoría la refuerzan asegurando que si Casillas vive la misma situación un año después, en otra etapa que nada tiene que ver a la que protagonizó el técnico portugués, es porque existe una mano negra que fuerza su suplencia. Y la consolidan asegurando que Ancelotti es un ‘técnico de club’. Sin embargo, se quedan sin argumentos cuando se les pregunta si Diego López merece o no ser titular después de demostrar una regularidad envidiable ofreciendo un nivel alto y salvando en muchos partidos a su equipo. Es el debate instalado en la capital desde que Mourinho sentó a Casillas en el banquillo en el Trofeo Bernabéu del 2012.

La suplencia de Casillas ha disparado las apuestas sobre la posibilidad de que se vaya del Madrid, club al que llegó en 1990 para jugar en los prebenjamines con apenas 10 años. Cumplidos los 32 se debate entre pasar página o colgar las botas en el club. “En un futuro me veré fuera… dentro de 10 años. Con 38 años me costará más. Mi presente es blanco hoy. Estoy encantado de estar en el Madrid. En cinco o seis años ya se verá”, declaró en el programa ‘El Hormiguero’, aunque todo indica que de seguir en el banquillo acabará marchándose en junio a pesar de tener contrato hasta el 2017 y un sueldo bruto de 7,5 millones de euros. Florentino Pérez le aseguró que facilitaría su salida y podría rebajar a los 15 millones de euros la cláusula que tiene y que asciende a los 150.