MI VERDAD

¿Se ha vuelto loco Mourinho?

Josep Maria Casanovas

DENUNCIA SIN PRUEBAS. ¿Quién se cree que es? ¿Qué pretende? ¿De qué va? ¿Dónde quiere llegar? Mourinho ha entrado en una espiral peligrosa, en una dinámica envenenada, en un desafío permanente. Se cree el más listo, el más valiente, el más descarado. Cuando la verdad es que solo es el más arrogante, el más chulo, el más suicida. Le mata la vanidad de querer ser siempre protagonista, de iniciar guerras que tiene perdidas, de impartir doctrina cuando es un gran impostor. Su última provocación ha sido pasar cuentas a Del Bosque, ningunearlo. Para ello no ha dudado en coger la escopeta de caza y disparar contra la FIFA como si fuera un muñeco de pim-pam-pum. Por este camino tiene todas las de perder, lo que denuncia no puede demostrarlo. Pone en cuestión el ganador de la elección de mejor entrenador del mundo. Para ello acusa al máximo organismo futbolístico de falta de transparencia, de irregularidades en la votación, de juego sucio. Viene a decir el portugués que la elección la ganó él pero que fue manipulada para que el vencedor fuera el seleccionador español. Esto se llama envidia, rencor y malas artes. Un tipo que es capaz de hacer declaraciones de esta bajeza a una televisión portuguesa, es poco de fiar. El Madrid, que siempre ha mimado a las instituciones, ve como un empleado suyo las pone en entredicho. Esto lo dice otro y le obligan a retractarse, con Mou no se atreven.

ESTÁ CONDENADO. Florentino Pérez está harto, no puede más. Ya le molestó mucho que no acudiera a la gala de la FIFA alegando trabajo y después, a la hora del reparto de premios, tuvo la desfachatez de ir a ver el entrenamiento de su hijo. Se ríe del presidente, se la tiene jurada a Casillas, ha decidido irse gane o pierda la Champions. Esta es la hipótesis con la que trabaja el presidente blanco, busca entrenador para la próxima temporada. Pero antes, no tendrá escrúpulos para quemar las naves, ganarse más enemigos y dejar la plantilla destrozada. Es el precio por tener una mala persona como entrenador. Por allí donde pasa, cuesta de que vuelva a crecer la hierba. Declarar la guerra a la FIFA ahora no viene a cuento. Querer desmerecer a Del Bosque que es campeón de Europa y del Mundo, es otra locura. Pero Mou solo piensa en Mou, solo le interesa Mou. Tiene la directiva en contra, la plantilla dividida y la prensa enfrentada. Demasiados frentes abiertos, morirá matando.