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Movistar Inter, campeón de Liga con escándalo arbitral

El conjunto madrileño conquistó su tercer título liguero consecutivo con dos tantos de Cardinal en la segunda mitad ante un Barça más que digno. Lo peor, los árbitros.

David Rubio

No pudo ser. Y eso que el Barça Lassa lo intentó todo y se vació en un partido lleno de alternativas que decidió el mayor acierto visitante cara a portería y una lamentable actuación arbitral que resultó más que decisiva por su parcial criterio en las faltas (incluidas las sextas), en las tarjetas y hasta en un penalti que no quisieron ver.

Ello no debería empañar la extraordinaria temporada de Movistar Inter, que ha sido el mejor equipo de la temporada, que ganó con abrumadura superioridad la Liga regular y que este sábado ha vuelto a ser mejor que el Barça.

Por tanto, amarga, muy amarga despedida del Palau para Marc Carmona, Saad, Gabriel, el inédito Cristian ya  buen seguro Lin y Wilde. Los seis han sido clave en la mejor etapa de la historia azulgrana y la afición supo reconocerlo al final del partido.

Los primeros minutos fueron un toma y daca entre ambos equipos, que buscaron sus opciones en ataque sin descuidar la retaguardia conscientes de que cualquier error podría resultar fatal.

Jesús Herrero y Paco Sedano demostraron sus poderes a disparos de Wilde y Ricardinho, respectivamente. Inter tenía más posesión, pero Ferrao aprovechó un despeje del meta visitante a chut de Aicardo para firmar el 1-0 en el 5’.

Sin embargo, la situación no era tan halagüeña como podría parecer, ya que ‘Rinconete’ y ‘Cortadillo’ disfrazados de pareja arbitral estaban haciendo de las suyas. Los ínclitos Alonso Montesinos y Urdanoz Apezteguia situaron al Barça Lassa con cinco faltas a los ocho minutos mientras que los visitantes llevaban solo dos pese a unas manos de Darlan y  varias infracciones obviadas sobre Wilde.

Tan malos son, que la más clara, a Pola al borde del 8’, se la habían ‘tragado’. Ello motivó que el Barça replegara sus líneas, lo que motivó una posesión casi total de los madrileños.

Los azulgranas rozaron la perfección en defensa con un excelente Saad que se multiplicó en beneficio del colectivo. Paco Sedano se exhibió ante los remates de Ricardinho en el 10’ y de Cardinal por dos veces (11’ y 13’). El Barça reaccionó con una gran llegada de Marc Tolrà en el 14’ y en una doble ocasión de Batería y Dyego que desbarató Jesús Herrero.

Pero Alonso y Urdanoz y no estaban contentos. Faltaba la ‘traca’ final. Y llegó en una discutible falta de Sergio Lozano que permitió a Ricardinho fusilar a Sedano desde el doble penalti (lo lanzó a unos seis metros). El caso es que al descanso se llegó  con empate a uno y con los árbitros faltando al respeto al delegado azulgrana cuando fue a hacerles una observación tras el pitido final.

Tocaba hacer borrón y cuenta nueva, dedicarse a jugar y olvidarse del ‘show’ arbitral. Sin embargo, en el túnel de vestuarios se vivió un conato de pelea multitudinaria entre ambos equipos… Lamentable.

De regreso, el Barça se ‘plantó’ con cinco amarillas (la vieron Wilde y Gabriel) antes de que Ortiz viera la primera visitante en el 29’. Para entonces, Sergio Lozano había rematado al larguero en el 26’ y dos minutos después se había adelantado Inter con un gol afortunado de Cardinal, cuyo chut tocó en la zaga blaugrana y despistó a Paco Sedano.

Ambos equipos se situaron con cinco faltas a nueve minutos del final y los colegiados volvieron a hilar fino para señalar la sexta a Dyego en el 33’. Paco Sedano desvió con la mano el lanzamiento de Ricardinho y, acto seguido, Cardinal derribó a Dyego dentro del área ante la pasividad arbitral y la indignación del Palau y del banquillo azulgrana.

Marc Carmona veía al equipo bien y se guardó el ‘portero-jugador’ hasta que, a falta de 3:38, no le quedó otra. Por cierto, que en los dos primeros partidos de la final, el ataque de cinco no había podido salir peor. Y se repitió la historia. Pérdida infantil de Batería y 1-3 de Cardinal en el 37’.

Se acabó. El Barça Lassa cayó con la cabeza muy alta ante un extraordinario rival, el mejor de la temporada en España. Y con una patética actuación arbitral, el gran punto negro de este sábado. ¡Enhorabuena a los merecidos campeones!