Quieren convencer a Tito de que hay vida más allá de Thiago Silva

La precariedad de la defensa y el delicado estado físico de Puyol invitan a que el entrenador del Barça recapacite y analice otros futbolistas descartados hace meses 

Tomàs Andreu

El Barça lleva años arrastrando problemas en su línea defensiva. Las carencias detectadas en el eje de la cobertura no son nuevas y han requerido millones y millones de euros de inversión para intentar subsanarlas. Un esfuerzo importante que no se ha visto recompensado en gran medida hasta la fecha. Tito Vilanova lo sabe de primera mano, lo ha sufrido en sus carnes durante su etapa de fiel escudero de Guardiola y ahora que dirige la nave blaugrana en solitario. Hace unos días, SPORT reveló que el técnico recomendó el fichaje de Thiago Silva hace cuatro temporadas. Quizás por ello, y viendo las dificultades que el Barça ha padecido para apuntalar el centro de la defensa, el entrenador blaugrana se ha empecinado en señalar al futbolista del PSG como el único jugador que garantiza la solución a los males del equipo. Según su criterio, el resto de alternativas de mercado genera dudas. Tito es consecuente y lleva meses bloqueando todo tipo de nombres sugeridos de dentro y fuera del Barça. No más errores ni inversiones en 'refuerzos de riesgo'.

El club, a través de la plana mayor de la directiva y del área deportiva, asegura que ha hecho todo lo posible y casi lo imposible por abrir negociaciones con el PSG, pero la negativa de la cúpula del club parisino a valorar la salida de uno de sus buques insignia hace inviable la llegada del capitán de Brasil. Y es ahí donde se plantea el reto de convencer a Tito Vilanova que abra el abanico de posibilidades que brinda el mercado y acepte el riesgo de incorporar a otro jugador más allá de Thiago Silva.

En los últimos días se ha reabierto el capítulo de alternativas, al tiempo que se confía en que el técnico dé su brazo a torcer y muestre mayor flexibilidad y comprensión a la hora de analizar otras opciones que no el central del PSG. Argumentos de peso al club no le faltan. En primer lugar porque Tito es el primer convencido que el equipo debe reforzarse con un central puro, nato, nada de más readaptaciones al estilo de Mascherano, o en menor medida el propio Song. Pero el club maneja otro elemento clave que todavía hace más imprescindible incorporar a un defensa en el transcurso de este verano. La nueva lesión de Carles Puyol y las dudas que se vierten sobre su futuro generan mayores tensiones en la planificación de la temporada. Todo conduce a un punto sin retorno: el Barça 2013-14 debe firmar a un central de categoría. Si es Thiago Silva, perfecto... y todos contentos. Si se confirma que el brasileño se cae de forma definitiva de la lista, el club y la dirección deportiva apuestan por el segundo, tercero, cuarto o quien sea de la lista. Y ahí Tito debería cambiar de opinión.

El club trabaja en una doble vía para ofrecer un par de nombres solventes a su entrenador. La primera es conocida y pasa por David Luiz. El central del Chelsea está en rampa de salida, sin destino definido y con la sensación que el paso de los días juega a su favor. Su actuación en la Copa Confederaciones le ha revalorizado y en las últimas encuestas gana puntos. Algunas fuentes internas del Barça también advierten que no se descarta nombre alguno, incluso otro de los eternos candidatos, Mats Hummels, seguiría en el punto de mira pese a sus declaraciones señalando que se quedaba en el Dortmund. Todo vale si se pone a tiro y convence a un Tito Vilanova que los descartó a todos hace meses.

Habrá central, pero lo importante es que llegue por vía de consenso, sin generar divisiones internas. Directiva y área deportiva ya trabajan para que el entrenador haga frente común y se acabe por incorporar a un futbolista capaz de elevar el nivel de la defensa blaugrana.