Luis Enrique pide más fichajes para su proyecto

Después del partido ante el Niza del pasado sábado ya reconoció que el capítulo de fichajes todavía no había finalizado, aunque también matizó que “es muy difícil conseguir a alguien que mejore lo que tenemos aquí, por eso a veces no es tanto el mercado si no pensar si este jugador nos puede ayudar o no”.

Y en eso está el Barcelona: en acabar de rastrear el mercado en busca de esas dos posiciones que todavía faltan por reforzar. Estamos hablando, como todo el mundo sabe, de la banda derecha, concretamente el lateral y la del central.

Luis Enrique tendrá que hacer también encajes de bolillos para acabar de cerrar el capítulo de bajas porque sabido es que no es partidario de contar con una plantilla muy amplia –a los sumo 23 jugadores– y a día de hoy ya cuenta con 24 jugadores –Luis Suárez incluido– , que acabarían siendo 26 si añadimos los dos jugadores que han de venir, por lo que teóricamente tendrá que dar la baja a un mínimo de tres jugadores.

Con semejante panorama, el técnico asturiano sigue trabajando la planificación del equipo. En la visita de presidente Josep Maria Bartomeu a la concentración de Saint George's Park el pasado viernes, tanto el máximo dirigente blaugrana como el secretario técnico Andoni Zubizarreta y el propio entrenador estuvieron estudiando largo y tendido la situación de todos los casos abiertos.

Está claro que los dos candidatos preferidos por la dirección deportiva –Marquinhos y Cuadrado– cuentan con una serie de inconvenientes que hacen muy difícil cerrar las respectivas operaciones, aunque en el caso del brasileño la situación está enrocada por parte del PSG desde hace ya mucho tiempo, mientras que con el colombiano se podría desactivar en breve, ya que el jugador es el primero que ha confirmado que quiere venir.

Luis Enrique considera que necesita dos hombres poderosos en la banda derecha para poder ejecutar y desplegar el 3-5-2 que quiere escenificar en los grandes partidos. El central parece a día de hoy menos urgente que el lateral. Esa fue la principal conclusión de la cumbre en los Midlands.