La FIFA toma nota de la actitud del Madrid

El Madrid estuvo presente en alma en Zúrich, pero no en cuerpo, algo imprescindible si se quiere quedar bien en la foto que persigue cada año la FIFA y que tan buenos dividendos les aporta a sus dirigentes. El organismo que rige el fútbol mundial no acabó nada contento con la actitud del técnico blanco, José Mourinho, ni tampoco con sus jugadores, que no acudieron a la gala de entrega del Balón de Oro.

El club blanco se excusó poniendo como motivo el encuentro que ayer por la noche, un día después de la fiesta, jugaba la vuelta de octavos de final de la Copa en Málaga. Pero no es algo que a la FIFA le importe demasiado, más allá de sus ingresos, por lo que creen que la expedición blanca podría haber estado, perfectamente, en Zúrich compartiendo ceremonia con Leo Messi, Xavi, Guardiola y compañía. Para la FIFA fue una manera de, indirectamente, rebentar la fiesta y crear un precedente peligroso. A partir de entonces, cada vez que un futbolista o entrenador se sienta perdedor, podrá explicar que Mourinho y Ronaldo tampoco acudieron a la entrega del Balón de Oro. Para los mandatarios del organismo futbolístico mundial fue una especie de desprecio por parte del Real Madrid. Para ellos, el único objetivo no era preparar bien el duelo ante el Málaga, sino ahorrarse la imagen del verano, cuando la UEFA entregó el premio a los mejores jugadores de la Champions League 2010-2011 en Mónaco y Leo Messi fue el mejor bajo la atenta mirada de Cristiano, que no sabía donde mirar. La FIFA no olvida y toma nota de todo lo sucedido en Zúrich, lo que pasó y lo que no pasó por la ausencia del Real Madrid.