El fichaje de Leo Messi fue un 'boom' en su momento. No solo porque un futbolista al que todos imaginábamos la vida entera ligado al Barça anunciara su marcha, sino porque decidía marcharse al PSG. Un rival directo en Europa de su exequipo. Y, al mismo tiempo, el único o de los pocos que podía asumir su ficha. El argentino aterrizaba en la capital gala y, como era de esperar, empezaba a revolucionar el mercado futbolístico.

El PSG ingresa más que nunca en el primer año de Messi (leer noticia)