Literalmente el sistema de llantas hookless es un tipo de rueda que prescinde de la rebaba interna que permite talonar las cubiertas para que no se salgan. Es decir, se trata de llantas sin el “gancho” interno, de ahí su nombre: hook (gancho) less (sin).
Recientemente, un par de incidentes en el ciclismo profesional han puesto en el punto de mira de la Unión Ciclista Internacional (UCI) este sistema de llanta y cubierta. Los fabricantes se han defendido, explicando que dichos problemas llegaron por un fuerte golpe en la rueda durante la carrera.
Sin embargo, la UCI ha emitido un comunicado en el que explica las distintas acciones que están llevando a cabo para garantizar la seguridad de los ciclistas.
Ventajas del sistema Hookless
Y estarás pensando: ¿qué beneficio puede tener este sistema frente al reborde que permite fijar la cubierta? Esencialmente la reducción del peso de las llantas.
Como ya sabes una reducción del peso de algunos componentes (como en este caso las ruedas) puede suponer una mejora competitiva muy importante. Sobre todo en ciertas pruebas como las contrarrelojes y más teniendo en cuenta lo apretada que está la clasificación en según qué pruebas. Algunas, como la última Vuelta a España de 2023 se decidieron en apenas unos segundos de diferencia.
Con este sistema, el aire de la cámara es el que ejerce la presión necesaria para mantener la cubierta pegada a la llanta y evitar que acabe saliéndose. Así se simplifica la fabricación y las marcas no tienen que añadir ese reborde extra de refuerzo, reduciendo de este modo el peso de las ruedas sin comprometer su resistencia.
